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La fiebre en los perros es un síntoma común por varias situaciones, reconocerla y proporcionar el cuidado adecuado es esencial para su bienestar. Lo principal es consultarle a un veterinario, ya que esto es una señal de que su canino no está bien. Así mismo, le contamos cuáles son los síntomas para que los identifique y los cuidados que debe tener.
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¿Cómo darse cuenta de que un perro tiene fiebre?
- Temperatura corporal elevada: la fiebre se considera cuando la temperatura rectal de un perro supera los 38.5°C (101.3°F). Para tomar la temperatura de su perro, puede utilizar un termómetro digital o infrarrojo específico para mascotas.
- Cambios en el comportamiento: observe si su perro muestra cambios en su comportamiento. Algunos signos comunes de fiebre incluyen cansancio, falta de energía, apetito reducido, agitación o nerviosismo.
- Respiración rápida o dificultosa: la fiebre hace que la respiración de su perro sea más rápida o dificultosa de lo normal.
- Nariz seca y caliente: la nariz de un perro sano suele estar húmeda y fría. Si nota que la de su perro está seca y caliente, es un signo de fiebre.
- Enrojecimiento de las encías o mucosas: examine las encías y las mucosas de su canino. Si están enrojecidas o inflamadas, es una señal clara.
- Temblores o escalofríos: algunos perros con fiebre experimentan temblores o escalofríos.
- Aumento de la sed: la fiebre provoca deshidratación, por lo que su perro podría beber más agua de lo habitual.
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Cuidados a tener con un perro con fiebre
- Mantenga al perro hidratado: la fiebre causa deshidratación, por lo que es importante asegurarse de que el perro tenga acceso constante a agua fresca. Si el perro no está bebiendo lo suficiente, se puede intentar ofrecerle cubitos de hielo o agua con sabor para fomentar la hidratación.
- Cree un ambiente cómodo: asegúrese de que el lugar donde el perro descansa sea cómodo y tranquilo. Evite cambios bruscos de temperatura y mantenga la habitación bien ventilada. Utilice mantas o almohadas para que se sienta más cómodo.
- Controle la temperatura corporal: vigile regularmente la temperatura del perro y siga las instrucciones del veterinario para el tratamiento de la fiebre. Use compresas de agua tibia en la cabeza y el cuerpo para reducir la fiebre, pero tenga cuidado de no enfriar en exceso al animal.
- Ofrezca una alimentación adecuada: si el perro no tiene apetito debido a la fiebre, no lo fuerce a comer, pero asegúrese de que tenga acceso a comida de alta calidad y apetitosa. Ofrezca alimentos blandos y fáciles de digerir, como arroz con pollo o alimentos enlatados para perros enfermos, siguiendo las recomendaciones del veterinario.
- Siga las indicaciones del veterinario: consulte a un veterinario tan pronto como sospeche que el perro tiene fiebre. El veterinario determinará la causa y recetará el tratamiento adecuado, que incluye medicamentos para reducir la fiebre y tratar la enfermedad subyacente. Siga las indicaciones del veterinario al pie de la letra y administre los medicamentos según lo prescrito.
Recuerde que la fiebre en los perros es un síntoma de una afección, por lo que es esencial abordar la causa para que el perro se recupere por completo. No dude en comunicarse con su veterinario si tiene preguntas o preocupaciones adicionales sobre el cuidado del perro con fiebre.
*Este artículo fue escrito y curado por el equipo de Robby Mascotas con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano.
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