Muchas de las series más relevantes de plataformas como Netflix, HBO o Amazon Prime se surten con realidades como la nuestra, igual que los memes. Historias repetidas de droga, violencia, corrupción y miseria.

La verdad es que cargamos una cruz a cuestas llena de estigmas por cuenta de la producción de drogas ilícitas, y los problemas sociales que el negocio del narcotráfico nos ha traído.

¿Cuál es el impacto que hemos dejado en el mundo? desde millones de adictos y muertos, hasta una enorme producción de series y memes en los que desafortunadamente terminamos siendo una enorme fuente de inspiración.

Muchos colombianos creen que, por no haberlos tocado la violencia, el uso de drogas, la corrupción y demás horrores de nuestra sociedad, nada les va a pasar. Cometen un grave error. Parafraseando a Bertol Brech: un día te tocará a ti, pero cuando sea muy tarde, porque no habrá nada que hacer.

Luego de masticarlas muy despacio, intente unir los puntos en común, posiblemente evidentes, de dos series gringas y una colombiana, que muestran cómo se llega a la corrupción desbordada por un negocio multimillonario imposible de acabar y los errores garrafales de los gobernantes frente a los conflictos por causa del consumo y producción de drogas ilícitas.

WIRE Vs EL BRONX

Wire producida y emitida por HBO, es valorada por la crítica especializada como una obra maestra y una de las mejores de la historia de la televisión.

Es una serie policiaca de 60 capítulos de una hora, en 5 temporadas. El primero se emitió en 2002 y el último en 2008. Con la problemática del tráfico y consumo de drogas en la ciudad de Baltimore.

Muy similar en temática a otra exitosa serie como El Bronx del Canal Caracol; Wire parece un retrato basado en nuestra penosa realidad.

En las dos series se evidencia el manejo equivocado de las autoridades a un problema de 40 años que se ha afrontado con excesos, pocos logros y cada tanto una receta peor que la anterior debajo del brazo del político de turno.

Destaca las relaciones de poder entre policías y autoridades, la manipulación de los políticos que aprueban los ascensos de los oficiales y un teléfono roto, como consecuencia de la infiltración en los cargos más altos de personas a sueldo de esos carteles.

Resulta ser una visión ampliada de las turbulentas relaciones de poder entre las instituciones, los dueños del negocio y las consecuencias de enfrentar el crimen organizado. En este reflejo real, se dibuja un pulpo de mil brazos, el consumo masivo de la droga que exportamos, que no deja nada.

La adicción y el consumo de drogas es una enfermedad colectiva, un virus mortal como el Covid 19, que luego muta, se multiplica y se vuelve imposible de controlar.

Las dos series muestran, además, el drama del consumo y la astucia en la venta, la sórdida vida de los expendedores y el protagonismo de los políticos que se lucran combatiendo o negociando con él monstro. También, claro, la porción de la sociedad que paga por el vicio y que la consume desenfrenadamente.

En definitiva, el polvo blanco que se esnifa, es un cáncer con metástasis para el mundo. Por desgracia, como las matas de cilantro, estamos en casi todos los caldos cuando hablamos del tema.

El tan popular “perico”, sin duda, acaba siendo el producto de mayor exportación y penetración en los mercados mundiales, dejando una marca, un tatuaje, difícil de difuminar. Y lo más sorprendente, el sostén de nuestra economía.

EUPHORIA

No puedo evitar sumar a lo anterior, un capítulo de la famosa serie Euphoria, que también se transmite por HBO. Si bien la trama impresiona, el quinto capítulo de la segunda temporada es delirante pues narra con detalle los momentos frenéticos, dolorosos y de tortura que sufre una adolescente de clase media, con la increíble actuación de Zendaya quien caracteriza a una chica en estado de abstinencia por el uso de opiáceos y el consumo de otras drogas duras, incluida la cocaína.

El descenso de la niña-mujer a los infiernos, el sufrimiento de la familia, el caos y el dolor de la autodestrucción son devastadores.

Colombia: fuente de inspiración hasta de memes

Cientos de memes y bromas inundaron las redes sociales, horas después de que la Selección Argentina de fútbol le ganara a la Selección de Colombia, en las eliminatorias al mundial.

Tal como sucedió en Wire, en Buenos Aires hubo una intoxicación masiva que dejó al menos 25 muertos y 90 más, gravemente enfermos, debido a la “alteración”, dijo la prensa, de la cocaína que se consumió, con un químico para dormir elefantes que le añadieron. La cocaína adulterada fue vendida luego del partido entre Colombia y Argentina.

La calamidad pública fue tal, que las autoridades sanitarias por todos los canales advirtieron a la población sobre los efectos devastadores de esta cocaína que estaba en las calles.

Adivinen lo que decían los memes: “Le ganamos a los colombianos y envenenaron la falopa (cocaína) que nos venden.”

Y así, seguiremos pasando de la realidad, al dolor, a los memes, a los dramas mientras los gobiernos de Colombia y el mundo siguen aplazando una discusión pendiente- ¿Qué hacer, si lo que ya se hizo no sirvió?

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