Aunque sus abogados creían que podrían seguir aplazando su traslado al país, Mattos se embarcó temprano y llegó rodeado de funcionarios de Migración Colombia y la Interpol.

De acuerdo con El Espectador, pese a llegar con el rostro tapado con más que el tapabocas, al hombre de 73 años se le escuchó soltar frases que todavía carecen de explicación: “Quieren matarme, van a matarme. Colombia entera sabe quiénes son, ya han matado a dos“.

Carlos Mattos era el socio de la surcoreana Hyundai en Colombia. Sin embargo, esa casa automotriz decidió terminar su contrato y él interpuso una demanda para mantener la exclusividad, decisión que lo favoreció inicialmente.

El ‘caso Hyundai‘ surgió cuando el periodista Daniel Coronell reveló que hizo múltiples pagos para torcer ese caso a su favor. Funcionarios alteraron el sistema de asignación de casos para que le quedara al juez Reinaldo Huertas, quien le otorgó medidas cautelares recibiendo a cambio millonarias sumas y regalos.

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Este es el video del arribo a Bogotá, publicado por Coronell, quien adelantó que este jueves hablará del empresario y “de sus oportunas enfermedades”:

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