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La alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda, informó que policías encubiertos abordarán las rutas de buseta en la ciudad con el propósito de brindar seguridad a los miles de usuarios del transporte público colectivo. Buscan bajar la cifra de robos.
“Esta estrategia nos va a ayudar a que haya mayor seguridad en el transporte público. Entendemos que los temas de seguridad son complejos en las rutas y más cuando se llenan, por eso queremos brindar mayor confianza e incentivar el uso de este transporte en la ciudad”, dijo la mandataria.
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La iniciativa empezará en aquellas rutas que han registrado el mayor número de denuncias por robo y casos de intolerancia. El objetivo, según lo informado, es impedir este tipo de hechos y brindar a los usuarios un transporte seguro y de calidad.
Una de las usuarias, que fue consultada por la Alcaldesa en una de las rutas, opinó sobre la estrategia: “Me parece súper bien, porque por ejemplo hace 20 días venía en una ruta y se subió una señora y le sacó el celular a una muchacha, entonces sí sería efectivo”.
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En la actualidad, alrededor de 900 busetas operan en Ibagué, aunque no de manera simultánea, teniendo en cuenta la programación del pico y placa establecido para estos vehículos.
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