En rueda de prensa, el entrenador reveló que buscará liquidar este jueves a Colombia con un fútbol de velocidad para “hacerles sentir” los 3.600 metros de altitud.

Baldivieso es consciente, sin embargo, de que “hace mucho tiempo que hemos dejado de ser fuertes en La Paz”, únicamente por el supuesto temor a la altura de parte de los rivales.

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Por eso, cree que “tenemos que apelar a correr el doble que el rival. Los 3.600 metros existen, hay, pero debemos hacerlos sentir”, arengó Baldivieso en la última rueda de prensa antes del juego.

Según las estadísticas, los cafeteros arrancaron en La Paz un triunfo y cuatro empates, y cedieron una sola derrota, en los últimos veinte años.

Sin embargo, al margen de la altura, “tenemos jugadores de mucha jerarquía para jugar bien”, sostuvo Baldivieso, que volvió a señalar que “con seis o cinco días de trabajo no se pueden hacer milagros, pero estoy seguro que el que entre lo hará para dejar todo en el campo de juego”.

Baldivieso anunció también que dejará en la plantilla titular “a la mayoría de futbolistas que le han ganado (4-2) a Venezuela y que están acostumbrados a jugar en el país”.

Quiero que venga James, Cuadrado, todos, porque el jugador se motiva más. Quiero demostrar que en Bolivia se juega un buen fútbol, nosotros tenemos futbolistas que tienen hambre de gloria y mañana vamos a tener once guerreros en la cancha”, sentenció.

No obstante, admitió que “no tenemos jugadores que ganen 20 o 30 millones (de dólares). Tampoco juegan en las mejores ligas del mundo y, es más, acá cobran cada tres o cuatro meses”.

Bolivia está emplazada en la octava casilla de la clasificación sudamericana, con tres puntos en cuatro partidos, debajo de Colombia (4) y Argentina (5).

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