Miembros de una fundación en Ibagué se sienten amenazados por las lluvias

En la urbanización Tierra Firme van a cumplir dos meses de constantes inundaciones, debido a que la red de aguas lluvias proveniente del barrio Nuevo Amanecer fue taponada por un alud de tierra.

Este hecho perjudica la estructura de la fundación Concern Universal Colombia, y las viviendas aledañas, puesto que la tierra, los escombros y demás objetos removidos que llegan a las rejillas para que pase a desembocar estas aguas dificultan la filtración e inundan las residencias cercanas, afectando sus enseres y motivando la proliferación de insectos.

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Además, el inadecuado flujo de estas aguas lluvias desencadena una serie de riesgos que podrían cobrar varias vidas. Pues, al lado del sendero peatonal rincón de paz la humedad ocasionó hundimiento de tierra dejando un hueco por el cual la comunidad teme que los árboles más cercanos al orificio se caigan debido a que quedaron expuestas las raíces.

Caso particular 

La fundación, donde diariamente llegan aproximadamente 50 niños y niñas entre los 5 y 15 años, para recibir acompañamiento en sus procesos formativos, sin contar a los adultos que también asisten para fortalecer sus procesos sociales al igual que ambientales, ya no es considerado un espacio seguro, pues las personas temen que en cualquier momento se vean afectados, o en un descuido los menores de edad se vayan por el hueco. Lo anterior, los llevó a demarcar con cinta y polisombra las zonas de riesgo, para evitar tragedias, sin embargo, no logran sentirse seguros y, por ende, emitieron varios derechos de petición a Cortolima, el Ibal y Gestión del Riesgo con la intención de una pronta solución.

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El coordinador de la fundación, Mauricio Montenegro Rojas indicó, “cuando se formó ese hueco vinieron en representación del Ibal un supervisor, un inspector y otras personas que sacaron una roca, y también elaboraron un informe, pero hasta el momento no ha pasado nada, y ya se cayó una persona, entonces preocupa que alguien más se pueda caer.

“Además, el Ideam volvió a decir que las lluvias iban a ser más fuertes, y es un peligro que un torrencial aguacero, como los que se han registrado en los últimos días, hagan caer esos dos árboles que están al lado, porque ese cráter cada vez sede más”.

Aunque las instituciones aún tienen tiempo para darle respuesta a los derecho de petición, desde el Ibal se informó que se va a programar una visita de alcantarillado para revisar, teniendo en cuenta la disponibilidad de los encargados.

No obstante, la comunidad piensa que las instituciones solo van a intervenir la zona cuando suceda una tragedia.

“No hay una acción inmediata y eso preocupa sobre todo cuando un tubo de 24 pulgadas constantemente se tapa y represa el agua, entonces necesitamos que al menos nos digan si hay presupuesto para saber a qué atenernos” puntualizó Montenegro.