"Sáquenos de aquí": el llamado desesperado de batallón que fue atacado por disidencias

Un grupo de 20 soldados que realizaban labores de desminado humanitario en el Huila lanzó un SOS para ser evacuados de la zona. Los uniformados, que patrullan sin armas, fueron atacados por disidentes de las Farc el pasado 31 de mayo y ahora temen por su integridad física.

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Los soldados denuncian hostigamiento por parte grupos armados ilegales, aseguran que es un ‘SOS’ y que deben salir de la vereda Río Blanco en Baraya, Huila, donde ejercen mayoritariamente su labor.

El grupo de soldados del Batallón de Desminado Humanitario número 5 que fue amenazado por hombres armados, que se habrían presentado como miembros de la estructura ‘Darío Gutiérrez’ de las disidencias de las Farc; y que los hicieron bajar del carro oficial, hurtaron sus equipos y quemaron el vehículo, el pasado 31 de mayo, ahora los uniformados lanzaron una alerta al Ejército Nacional, mediante un video en el cual exigen ser sacados de ese lugar.

Cabe destacar que, las disidencias de las Farc también están atemorizando otras zonas del país, como en el Cauca.

En el video, que fue publicado en redes sociales, quien toma la palabra, es el General Comandante del Ejército, Coronel Jonh Fredy González Correa, quien, acompañado de al menos 20 soldados de su batallón, hace un llamado a organizaciones de derechos humanos.

“La población civil ya no nos deja estar en sus casas, ni en sus predios por temor a las represalias”. La brigada asegura que hay muy pocos soldados en la zona, a pesar de que les han prometido que enviarían más pelotones para protegerlos.

Cabe aclarar que los suboficiales y soldados encargados de la labor humanitaria de desminado no portan ningún tipo de armamento.

“Sé que por esto a muchos nos van a echar del ejército” afirma el coronel, pero continúa diciendo que lo que hacen es un llamado a organizaciones de derechos humanos y de derecho internacional humanitario “para que puedan interceder por nosotros”.

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La pronunciación del Ejército Nacional en el momento de la amenaza al batallón número 5 fue: “esta es una clara acción terrorista que viola los derechos humanos y las disposiciones del derecho internacional humanitario (…) Sus acciones criminales no solo ponen en peligro la vida e integridad de la población y los desminadores, sino que podría interrumpir la continuidad de las operaciones de desminado humanitario”.

Sin embargo, según la denuncia hecha por los soldados, no recibieron ningún tipo de protección tras el ataque.