Pueblo suizo que paga a quien vaya a vivir allá ya tiene nuevos vecinos

Se trata de Albinen, una pequeña localidad que ganó fama mundial en 2017 al hacer la oferta de darles un buen dinero a las personas que cumplieran unas condiciones (un poco complicadas) y estuvieran dispuestas a trasladarse allí, para evitar el abandono total.

Una familia de 4 personas y una mujer soltera fueron los primeros candidatos, de los miles que se presentaron, que cumplieron las difíciles condiciones requeridas para vivir en el tranquilo pueblo suizo, informa El País, de España.

La generosa oferta de Albinen consistía en darle 25 mil francos suizos (unos 80 millones de pesos colombianos) a cada adulto que trasladara su residencia al pueblo, y 10 mil francos (casi 30 millones de pesos) a cada niño. O sea, una familia de 4 integrantes podría recibir cerca de 70 mil francos (más de 200 millones de pesos).

Pero como ha dicho el Ayuntamiento, hubo mucha desinformación sobre la oferta de Albinen, por lo que muchas personas pensaron que, sin mucha dificultad, podrían hacerse con el atractivo beneficio. Pero la realidad es muy diferente, porque los requisitos son muy rigurosos.

Las condiciones para postularse son ser suizo o tener un “permiso de establecimiento suizo tipo C”, una autorización que el país les da a ciertos ciudadanos después de residir sin interrupciones entre 5 y 10 años. Además, el aspirante debe demostrar que va a hacer una inversión de al menos 200 mil francos suizos (más de 570 millones de pesos colombianos) en el pueblo, que no podrá abandonar antes de 10 años si no quiere que le pidan toda la ayuda brindada.

Varios pueblos en Europa se han visto obligados a hacer ofertas similares (aunque no siempre tan generosas) a la de Albinen, también por falta de habitantes. Uno de ellos es Bormida, en Italia, una localidad de apenas 394 vecinos que prometía 2.000 euros a quien se trasladara allí. Otro es Candela, la ‘pequeña Nápoles’, también en Italia, que hizo una oferta similar en 2017.

Veremos cuántas personas más logran cumplir con las altísimas exigencias de Albinen.