Niño de 12 años fue hallado sin vida: su padrastro y 3 hombres más estarían involucrados

Las autoridades del estado Miranda, Venezuela, han iniciado una exhaustiva investigación tras la trágica muerte de un niño de 12 años en la parroquia Cumbo, municipio Andrés Bello. Según el informe oficial del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), el caso ha llevado a la captura de cuatro sospechosos vinculados a los hechos.

El director del Cicpc, Douglas Rico, informó que los detenidos fueron identificados como José Efraín González, de 52 años; Enrique Javier Espinoza, de 30; Juan José Padrón Abello, de 30; y José Miguel Martínez González, de 32. La detención se llevó a cabo en el caserío 02 de Cumbo, donde se hallaron pruebas que ahora están en poder de las autoridades para el proceso judicial.

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Según la información preliminar recabada por los investigadores, se determinó que la víctima habría ingerido una sustancia que le ocasionó la muerte. Este hallazgo llevó a las autoridades a abrir una línea de investigación por presunta incitación al hecho.

Además, los indicios apuntan a que el niño habría sido víctima de abuso por parte de su padrastro y tres hombres más, quienes eran amigos de él, dentro de un vehículo. De acuerdo con los reportes, la víctima habría sido sometida a múltiples vejámenes antes de su fallecimiento, lo que ha provocado una gran indignación en la comunidad.

Los sospechosos fueron puestos a disposición de la Fiscalía 71° Nacional del Ministerio Público, especializada en delitos que atentan contra la integridad de jóvenes y adolescentes. Durante el procedimiento de captura, los agentes del Cicpc incautaron dispositivos móviles y otros elementos que podrían contener información clave para esclarecer los hechos.

Por su parte, la comunidad de Barlovento ha manifestado su conmoción ante lo sucedido y ha exigido justicia para la víctima. Organizaciones defensoras de los derechos de la infancia han solicitado que este caso sirva como punto de partida para reforzar las medidas de protección a menores en situación de vulnerabilidad.

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El Cicpc continúa con las investigaciones para determinar con precisión los detalles del caso y establecer responsabilidades. Las autoridades han instado a la población a colaborar con cualquier información adicional que pueda ser relevante para el proceso judicial.

Este lamentable suceso ha causado un fuerte impacto en la opinión pública y ha puesto en evidencia la necesidad urgente de fortalecer las políticas de protección infantil en la región. La Fiscalía y las organizaciones de derechos humanos seguirán de cerca el desarrollo del caso para garantizar que se haga justicia y que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos.