Nave privada que llegaría a la luna perdió comunicación y se desconoce su paradero

La misión japonesa Hakuto-R, que debía haber aterrizado este martes en la superficie lunar, no volvió a tener contacto con el centro de control que la seguía desde la Tierra y por ahora su paradero es completamente incierto.

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La empresa Ispace, responsable del proyecto, publicó un comunicado en el que señaló que “por el momento, el centro de control de la misión Hakuto-R en Nihonbashi (Tokio) no ha podido confirmar el éxito del Lunar Lander”, la nave que debía explorar el satélite japonés que está en órbita, recogió El Mundo.

La misión tendría que haber llegado a la luna a las 16:41 GMT (11: 41 a. m. en Colombia) según la cuenta atrás que pudo verse en la transmisión en directo ofrecida por la compañía japonesa.

Así era el plan inicial antes de perder contacto:

Ante la falta de noticias, los ingenieros especialistas en operaciones comenzaron a trabajar para confirmar el estado actual del módulo de aterrizaje, por lo que buscarán entregar más noticias en las próximas horas sobre lo hallado.

Estaba previsto que la señal de la sonda pudiera tardar unos minutos en ser recibida, pero el tiempo pasaba sin noticias y la tensión en la sala aumentaba cada vez más, por lo que la compañía decidió cortar momentáneamente la transmisión en directo hasta obtener más detalles.

Unos 20 minutos después, Ispace retomó la conexión y un portavoz informó de que habían tenido comunicación con la nave hasta momentos antes del alunizaje, pero finalmente esta se había perdido por completo.

A pesar de la preocupación de quienes seguían el aterrizaje, el portavoz de la compañía aseguró: “Estamos muy orgullosos porque hemos logrado muchas cosas en esta misión, como haber conseguido datos pocos momentos antes del aterrizaje”.

Es de destacar que la empresa japonesa Ispace es la primera firma privada del mundo que había programado aterrizar una nave en la Luna, por lo que de haberlo logrado hubieran conseguido un hito en el mundo del espionaje espacial.

La Agencia japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) envió una misión similar en colaboración con la Nasa el pasado noviembre, aunque también se perdió comunicación con la misma un día después de su lanzamiento.