Alerta de tsunami en Japón tras terremoto de magnitud 7,6 que sacudió con fuerza el norte del país

Las autoridades activaron los protocolos de emergencia y pidieron a la población evacuar de inmediato las zonas costeras. Se mantiene vigilancia permanente.

Un terremoto de magnitud 7,6 sacudió este lunes el norte de Japón, por el que la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) declaró una alerta por tsunami de hasta tres metros, sin que por el momento se haya informado de víctimas ni daños materiales.

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De acuerdo con información con agencias internacionales, el terremoto ocurrió a las 23:15 hora local (14:15 GMT) frente a las costas de la prefectura de Aomori, una región ubicada en el noreste del archipiélago.

Las autoridades meteorológicas confirmaron que el temblor alcanzó una intensidad de nivel 6 superior en la escala sísmica japonesa —que mide la agitación en superficie y el potencial destructivo— en la ciudad de Hachinohe. También registró un nivel 6 inferior en los pueblos de Oirase y Hashikami, indicando un movimiento extremadamente fuerte capaz de causar daños severos en estructuras poco reforzadas.

La AMJ extendió además una alerta de tsunami de hasta un metro para las prefecturas de Miyagi y Fukushima, así como para la zona sur de Hokkaido.

A ello se sumó una advertencia general para toda la costa del Pacífico japonés por posibles variaciones en el nivel de la marea. Las autoridades pidieron a la población mantenerse alejada de las playas, muelles y áreas bajas, y seguir atentamente las instrucciones de los organismos de emergencia.

Ante la magnitud del evento, la primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, activó un equipo especial de seguimiento y coordinación desde el Kantei, sede del gobierno en Tokio. La mandataria subrayó la importancia de ofrecer información clara y oportuna a la ciudadanía, así como de implementar las medidas necesarias para mitigar cualquier daño.

“El Gobierno coopera estrechamente con las autoridades locales para tomar las medidas de desastre pertinentes, priorizando la vida de las personas”, afirmó en declaraciones transmitidas en directo por la cadena pública NHK.

Aunque las autoridades continúan evaluando el impacto, el país permanece en alerta mientras se monitorea el comportamiento del mar y se verifica el estado de las zonas costeras potencialmente afectadas.

Japón, uno de los territorios con mayor actividad sísmica del mundo, vuelve así a enfrentar los desafíos de un fenómeno natural que pone a prueba sus sistemas de prevención y respuesta.