Gobierno acaba los contratos por prestación de servicios en Colombia; hay condición

La jefa de la cartera laboral anunció este viernes seis de octubre que los contratos por prestación de servicios en el Estado tendrán que llegar a su fin. Dicha medida no quedó incluida en la reforma, pero el presidente Gustavo Petro había advertido que eliminaría ese tipo de contratación.

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“Las órdenes de prestación de servicios en el Estado las vamos a acabar. Ya tenemos unos procesos de meritocracia y desde luego para el año entrante disminuirán ostensiblemente porque no es justo. Es lo que yo llamo los contratos basura. No es justo que una persona trabaje 12 meses y le paguen ocho, pero además que le evadan a través de esta contratación sus derechos sociales”, afirmó la ministra Ramírez.

Previamente, el Gobierno planteó que las entidades públicas no puedan suscribir un contrato de este tipo si en sus plantas hay cargos vacantes por más de seis meses. Es decir, le apuntaría a acelerar el nombramiento de trabajadores como funcionarios de planta.

Aunado a ello, la directiva presidencial 08 de 2022 ordenó reducir en un 30 % el total de contratos por prestación de servicios en las entidades estatales.

Para este año, a las entidades se les recomendó que si firmaban contratos de prestación de servicios por más de cuatro meses debían presentar una justificación detallada y una argumentación de por qué esa función no podía ser cumplida por la planta permanente.

Contratos por prestación de servicios: cuántos hay y cuándo se acabarán

De acuerdo con Función Pública, en Colombia hay 911.440 contratos por prestación en entidades estatales. Por lo tanto, la medida anunciada por la ministra de Trabajo —que regirá a partir de 2024— impactará las condiciones laborales de muchas personas.

Según ha dicho el presidente Petro, los contratos de prestación de servicios deben acabarse porque son una “sobreexplotación” de los trabajadores, ya que en muchos casos son vinculados de esa manera para que el empleador ahorre costos de nómina.

El efecto de esta decisión cambia desde el punto de vista que se analice. Puede ser perjudicial para el empleador, a quien le incrementarían sus costos laborales, o buena desde la óptica del trabajador (contratista), quien garantiza un contrato justo y con las plenas garantías laborales establecidas para los trabajadores en la legislación colombiana.