Lo Bueno, lo malo y lo feo, de Millos Femenino 2 - Orsomarso 0, en Liga Femenina

El partido Millonarios Femenino 2 – Orsomarso 0 tuvo dos tiempos diferentes. En el primero, el visitante buscó vulnerar con transiciones y Millonarios se defendió mano a mano, y un segundo tiempo donde Millonarios se adueñó de la pelota y las embajadoras lograron superar a un rival que vino buscando un buen resultado.

Esto es lo bueno, lo malo y lo feo, de Millonarios Femenino 2 – Orsomarso 0.

LO BUENO: El apoyo del público. Cada vez que se lo permiten la hinchada acompaña a su equipo. Se sienten las vibraciones, el empuje y el aliento que baja desde la gradería para respaldar a las jugadoras en los momentos difíciles. El agradecimiento de las jugadoras a la gente en las graderías terminado el partido es clara muestra de cuando valoran ellas la presencia, la permanencia y la compañía en sus juegos.

LO BUENO: Ivonne Chacón. Sigue subiendo su nivel la delantera de Millonarios. Cada vez más colectiva, cada vez entrando en el circuito de juego, desbordando con su buena zancada por banda, llegando a generar peligro en el área rival. Las decisiones, hoy en especial, estuvieron más acertadas y eso ayudó a la fluidez del equipo en ataque.

LO BUENO: Los cambios. El profe Ánzola planteó buenas variantes para el complemento. Esto sumado al desgaste que hizo el equipo sobre el rival permitió llegar con mayor volumen y conseguir anotar. Es muy importante en este torneo corto y de juegos seguidos, miércoles-domingo, que el plantel titular se pueda ampliar y las jugadoras tengan la confianza para entrar cuando les sea requerido.

LO MALO: El juego recio. En la zona de volantes se dio mucho juego fuerte en varias ocasiones por parte del rival y en pocas por parte de Millonarios. Hay que seguir la idea que bien practica Millonarios cuando tiene el balón, buscando circulación y buen manejo del esférico.

LO FEO: La transmisión del partido. Para nosotros, todo lo que tenga el sello de Millonarios debe tener el mayor despliegue y el máximo alcance. Seguimos con transmisiones sin comentarios, sin multi-cámaras e incluso sin el tiempo de juego en pantalla para el televidente.