Donald Trump ha protagonizado peleas de la lucha libre en EE.UU.

El nuevo presidente de ese país está en el salón de la fama de la WWE desde 2003, además de tener negocios con esa organización deportiva.

En 2007, Trump apareció en Wrestlemania XXIII, uno de los shows de esta franquicia, y retó a su presidente, Vince McMahon, a una pelea en la que apostaron las cabelleras, registra Sky Sports.

En el que fue conocido como el ‘Combate de los billonarios’, Trump no se ensució casi las manos pues fue representado por Bobby Lashley. A su vez, por McMahon luchó Umaga.

Tal como lo hizo en las elecciones de primer mandatario, Trump ganó el combate y él mismo le cortó el pelo a su colega empresario, no sin antes tirarlo al suelo en una acción propia de la lucha libre:

Luego en 2009, el presidente electo de Estados Unidos se convirtió en dueño de una parte de la WWE, pero esto no fue excusa para que cuando apareciera en el ring, uno de los  luchadores más reconocidos de este deportes, Stone Cold, le cantó la tabla y hasta se burló de él por aparecer ‘El Aprendiz’ y limitarse a decir “estás despedido”.

No obstante, no hubo golpes, solo improperios:

También en 2009, Trump atendió una rueda de prensa acompañado de las luchadoras que hacen parte de este deporte y no perdió tiempo para alardear al lado de las despampanantes mujeres: