La banda fue desarticulada tras dos años de seguimiento y gracias a que la Policía infiltró a sus hombres para establecer la forma en que operaba. 21 personas fueron capturadas e imputadas como presuntos miembros de esta estructura criminal que se dedicaba al sicariato, hurto y fleteo en Bogotá, Boyacá, Cundinamarca y Tolima, informó Noticias Caracol.
Durante la audiencia de imputación de cargos, que recoge ese medio, la fiscal del caso reveló que los señalados delincuentes “cuentan con la colaboración directa e indirecta de funcionarios activos y retirados de la fuerza pública, en este caso de la Policía Nacional, corroborándose que algunos de los integrantes de la organización criminal son particulares, pero que portan uniformes, armas de fuego, los que son facilitados por personal activo”.
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Además, la funcionaria dijo que al parecer los líderes de la banda se encargaban de sobornar a los cuadrantes de la Policía para cometer los asaltos y crímenes sin ser detectados.
Por eso, agrega Noticias RCN, tres policías activos fueron identificados como cerebros de la organización por el uniformado que estuvo infiltrado en la operación.
“Hay un infiltrado que es el que ha dado el reporte de la mayoría de casos, reconocimientos fotográficos y videos”, explicó a ese medio el abogado defensor Jimmy Pepinosa.
Tres policías activos integraban una peligrosa banda de robos en la Sabana de Bogotá. La Fiscalía los acusa de 31 asaltos. pic.twitter.com/8gZLmcfwQ9
— Noticias RCN (@NoticiasRCN) 30 de mayo de 2017
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