Este miércoles 21 de junio se conocieron nuevos detalles entregados por el ente investigador sobre la muerte del coronel Óscar Dávila, de quien se estableció que sí se suicidó en medio del escándalo que lo envolvía por el caso de las chuzadas a las empleadas de Laura Sarabia.
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Una de las sorpresas en la entrega del reporte fue que el coronel tenía algunos problemas psicológicos y emocionales, por lo que estaba medicado con un fármaco para controlar sus cuadros de ansiedad y estrés por no soportar la presión mediática del escándalo en el Gobierno.
“Estaba expuesto a un alto grado de estrés”, dijo inicialmente el experto forense Juan Carlos Paredes de Medicina Legal, que dio más detalles de cómo el coronel llegó a consumir este tipo de medicamentos: “Es una sustancia que debe ser prescrita con fórmula médica; [de] lo que tengo conocimiento es que la esposa del coronel es odontóloga y él tenía un círculo cercano con la salud y posiblemente por esa vía pudo adquirir la medicina. Lo que pasa es que en Colombia sabemos que muchos productos requieren prescripción médica pero los terminan vendiendo relativamente de una forma libre”.
Según la Fiscalía, el coronel se encontraba tomando un medicamento que es un derivado de la benzodiacepina conocido como Alprazolam, que le controlaba su ansiedad y estrés.
Pese a ello, después de conocerse la muerte de Dávila, su exjefe en Presidencia Carlos Feria aseguraba que él no tenía ningún problema personal o emocional que lo estuviera afectando: “El coronel Dávila era una persona altamente entrenada para soportar presiones”.
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