En su carta, el arzobispo de Bogotá pide perdón por los casos de abusos sexuales a menores por sacerdotes que han sido denunciados en el país y promete “cero tolerancia” ante cualquier otro caso.

Asimismo, la arquidiócesis de la capital aseguró que tomará “todas las medidas” para que los responsables de los abusos sexuales sean castigados tanto civil como canónicamente.

Si se comprueba el abuso, un sacerdote jamás podrá volver a ejercer su ministerio”,

resaltó la curia bogotana en la misiva, difundida en su página web.

El pasado 14 de febrero, la directora del ICBF, Cristina Plazas, criticó un documento difundido por el abogado de la Archidiócesis de Cali, en referencia a un caso de abusos sexuales a menores por un sacerdote.

El documento aseguraba que hubo culpabilidad de los padres de familia en los abusos sexuales a menores del clérigo que fue condenado a 33 años de prisión.

(Pedimos) a la Iglesia católica que salga y rechace estas declaraciones. Nunca había visto un documento tan horrible”,

expresó la directora del ICBF en declaraciones a La W radio.

Como respuesta a esta petición, la archidiócesis de Bogotá, encabezada por el cardenal Rubén Salazar, emitió la carta de hoy en la que subraya que “la protección de los niños, niñas y adolescentes es una prioridad absoluta para la Iglesia católica en Colombia”.

Reconocemos que somos responsables ante sus padres de brindar todas las condiciones posibles para que nuestras instituciones sean un hogar seguro para sus hijos y nietos”,

agrega el documento, que se refiere además a la voluntad del papa Francisco de luchar contra los abusos sexuales en el seno de la Iglesia Católica.

“Los abusadores deben responsabilizarse de sus acciones ante la justicia”, resuelve la misiva, que destaca además que la Archidiócesis de Bogotá renueva su empeño para evitar que estas “atrocidades” vuelvan a suceder.

Con EFE