Escrito por:  Redacción Nación
Oct 1, 2023 - 9:59 am

El 2 de octubre de 2016 se votó en Colombia el plebiscito para refrendar los acuerdos del proceso de paz del entonces gobierno de Juan Manuel Santos con la extinta guerrilla de las Farc.

Ese día votaron 13’066.047 colombianos y un 50.21 % de los votos válidos optaron por decirle que no al acuerdo de paz frente a un 49.78 % que lo aprobó.

Aunque posteriormente se demostró que desde sectores del uribismo hubo una campaña sucia y de desinformación para engañar a los ciudadanos con puntos que no se habían acordado, la victoria del no representó una de las grandes derrotas de Santos en su presidencia, como él mismo lo ha confesado. El presidente estaba tan seguro que ganaría el sí, que ni pensó en un plan b.

Santos no solo perdió el apoyo de los colombianos al proceso de paz, sino que le dio fuerza a la oposición y a quienes tantos criticaban esos diálogos con la guerrilla.

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“Estábamos buscando que la gente saliera a votar berraca- […] Unos estrategas de Panamá y Brasil nos dijeron que la estrategia era dejar de explicar los acuerdos para centrar el mensaje en la indignación”, confesó Juan Carlos Vélez Uribe, gerente de la campaña del no, a La República apenas dos días después del plebiscito.

Así se volteó una votación que parecía inclinarse hacia el sí. Y es que tan solo unos días antes, el 26 de septiembre, se celebró un pomposo acto en Cartagena para que Santos y ‘Timochenko’ estamparan su firma en el documento ‘Acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera’. A ese evento incluso asistió Ban Ki-moon, entonces secretario general de la ONU, así que era impensable la victoria del no, pero sucedió.

Por eso, hoy primero de octubre, a pocas horas de cumplirse 7 años de ese día, Álvaro Uribe, uno de los más fervientes críticos de los diálogos de paz recordó ese día, aunque se mostró inconforme con lo que vino después.

(Vea también: Álvaro Uribe volvió a cargar contra Santos por Odebrecht: “Todo fue coordinado por él”)

En sus redes sociales, el expresidente dijo que Santos lideró un “golpe de Estado” para lograr una “paz equivocada que finalmente ayuda al terrorismo”.

El no obligó a una renegociación exprés de los acuerdos y posteriormente se puso en marcha todo lo que allí se firmó. Hasta ahora, Santos no ha reaccionado al mensaje de Uribe.

Más tarde ese año, Santos recibió el Premio Nobel de la Paz “por sus esfuerzos resolutos para poner fin a la guerra civil de más de 50 años de duración, una guerra que ha costado la vida a por lo menos 220.000 colombianos y ha causado el desplazamiento de cerca de seis millones de habitantes”.

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