Las autoridades fronterizas de Nogales, Arizona, ya en territorio estadounidense, tuvieron que ayudar a la mujer, que quedó suspendida con un arnés a 4,6 metros de altura, incapaz de moverse hacia tierra firme o de vuelta hacia su país, informa El Universal.
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La mujer, cuya identidad no se ha difundido en medios, fue abandonada por presuntos contrabandistas, que la estaban ayudando a pasar al otro lado de la valla que existe en varias zonas de la frontera entre Estados Unidos y México, pero que huyeron cuando vieron que venía la policía.
Publimetro México agrega que, al ver que se acercaban las autoridades, la angustiada inmigrante trató de subir de nuevo por una de las gruesas barandas de la valla, pero no lo logró, por lo que terminó en manos de la policía.
Por fortuna para la implicada, no sufrió ninguna lesión de consideración en su cuerpo, pero ahora debe rendirles cuentas a las autoridades estadounidenses por haber violado las normas inmigración de ese país, puntualiza Aristegui Noticias.
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