El portal Gawker.com asegura que una fuente confiable, quien iba a la misma empresa especializada en cuidados para el pelo a la cual atendían a Donald Trump, dice que el magnate se sometió a un tratamiento que le costó 60.000 dólares y cuyo mantenimiento mensual vale 3.000 dólares más.

La empresa en cuestión es Ivari International y sobre ella pesa una demanda interpuesta por un juez porque sus tratamientos son en extremo costosos, y a los tratamientos que se refiere es al de los microcilindros, el mismo que Trump tendría.

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Para ir más allá de la mera especulación, Gawker dice que casi nadie sabe de esa compañía, que no tiene sedes, excepto una en París y otra en el mismo piso 25 de la Torre Trump en Nueva York donde el magnate tiene su oficina, es decir, que en ese piso solo están la oficina de Trump y la empresa especializada en pelo.

“Conseguir una cita con Ivari es casi imposible, por lo cual pensamos que toda la compañía se mantendría con su supercliente: Trump”.

El portal pone en duda las revelaciones del mismo Trump a la revista Rolling Stone sobre el secreto de su cabello ‘natural’, y es que se lo lava con Head and Shoulders, lo deja secar al aire libre, lo cual le toma una hora mientras lee o hace otras cosas, y finalmente se lo peina todo hacia atrás en una sola pasada.

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