En el norte de Alemania, en el río Trave, un grupo de arqueólogos marítimos descubrió lo que podría ser una cápsula de tiempo. Se trata de un barco de hace 400 años de antigüedad que está completamente intacto. De acuerdo con los expertos, esta embarcación “se hundió casi de pie”.

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Pero, ¿cómo escapó de la descomposición esta nave, sobre todo porque el agua hace que la madera se pudra de forma veloz? La respuesta, de acuerdo con los investigadores, es porque fue rápidamente envuelto y protegido por una capa de lodo fino transportado por este afluente. 13 inmersiones con un total de 464 minutos proporcionaron a los investigadores suficiente material para su primer informe extenso sobre el barco hundido del período hanseático.

Fritz Jürgens, arqueólogo marítimo y líder principal en el proyecto, aseguró a LiveScience, que “la capa de lodo del río sobre los restos del naufragio pudo haber impedido que fuera colonizado por ‘Teredo navalis’, un tipo de almeja de agua salada llamada “gusano de barco” que se alimenta rápidamente de madera sumergida”.

Cerca a este barco encontraron 150 barriles de madera casi intactos, lo que indica que transportaba un cargamento de cal viva cuando se hundió a fines del siglo XVII. Este material se fabrica quemando piedra caliza.

Algunos datos señalan que la fecha del naufragio fue en diciembre de 1680, además, es probable que durante un giro antes de su entrada en Lübeck, hubiese podido chocarse. La embarcación pronto se hundió debido a las filtraciones generadas del golpe, según Jürgens.

La primera vez que se encontró parte de este barco fue en 2020, cuando las autoridades realizaban labores de navegabilidad por este río. Se encontró a 11 metros de profundidad y tenía entre 20 a 25 metros de largo, por lo que se cree que pudo haber sido un galeón. Unos datos que obtuvieron luego de diversos modelos 3D.

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Las imágenes de esta “cápsula de tiempo” y de lo que llevaba adentro fueron capturadas por Christian Howe, un buzo científico. Ahora, los arqueólogos marinos, encabezados por Fritz Jürgens, esperan que todo el barco sea levantado del lecho del río en los próximos años, un hecho que les dará la oportunidad de investigar a fondo el casco y su construcción.