Fitch Ratings ha emitido un informe que visualiza un aumento del 5 % en los precios de la vivienda para 2024, aunque con un tono de cautela. En Colombia, la situación parece desafiante, ya que se anticipa una reducción del ritmo de crecimiento del 12 % en 2023 a un rango del 5 % al 7 % en el próximo año, reprodujo La Fm.
La evaluación de la mencionada firma abarca varios países de América Latina donde se ha observado un alza en los precios de viviendas nuevas, produciendo preocupación en el sector de ventas de propiedades. Las proyecciones para Brasil y México también presentan desafíos con fluctuaciones en el crecimiento de los precios.
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El informe sugiere que, para el próximo año, los colombianos y otros latinoamericanos deberían prepararse para afrontar precios elevados al adquirir propiedades. La escasez de inventario se perfila como un factor clave, aunque se espera que la demanda sea más moderada, debido a las tasas hipotecarias elevadas.
El mercado inmobiliario colombiano ha enfrentado un año complicado, marcado por una caída del 50 % en las ventas de casas nuevas en noviembre, sumando 17 meses consecutivos de declive.
Los compradores de vivienda de interés social (VIS) han sido los más afectados, con más de 38.000 familias abandonando sus metas debido a tasas de interés elevadas, inflación y problemas con subsidios.
No obstante, la esperanza radica en la posibilidad de una tendencia a la baja en el aumento de los precios de la vivienda para el próximo año, teniendo presente la disminución de las tasas de interés.
Qué impacto tendrá en la economía colombiana la reducción de las tasas de interés
La junta directiva del Banco de la República tomó la decisión de reducir las tasas de interés en 25 puntos básicos, situándolas en un 13 %. Este ajuste responde a la disminución de la inflación al 10,15 %, según cifras del Dane.
La pregunta que surge es cómo esta medida influirá en el acceso a créditos para los colombianos. El Banco de la República destaca que la reducción de las tasas hace que endeudarse sea más asequible, incentivando así el consumo al facilitar la adquisición de productos y servicios a través de créditos.
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Sin embargo, este beneficio para los deudores implica menos rentabilidad para los ahorradores, quienes verán disminuir el rendimiento de sus ahorros. La medida plantea un equilibrio delicado entre estimular el gasto y no desincentivar el ahorro.
Además de su efecto en los ciudadanos, la reducción de tasas busca fomentar la inversión y el crecimiento empresarial. Hacer los préstamos más atractivos tiene como objetivo impulsar la actividad económica y contribuir al desarrollo del país. No obstante, se debe monitorear de cerca posibles tendencias inflacionarias que esta política podría generar.
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