Nunca había sido tan fácil: el viejo truco para enfriar la cerveza en pocos minutos

Nadie puede negar que una buena cerveza fría siempre es una excelente idea para el fin de semana, con familia, amigos, en vacaciones, cerca de una piscina o sencillamente en tu casa, para relajarte un poco y disfrutar de tu tiempo libre, viendo tu serie favorita o un buen partido.

Incluso, si no te distrae demasiado, es una gran opción para disfrutar mientras trabajas y quieres refrescarte un poco y relajarte, sin duda una buena cerveza fría podría hacer la diferencia.

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Pero muchas veces compramos cerveza y buscamos beberla helada pero tal vez no tengamos suerte y esté a temperatura ambiente. En muchas ocasiones, tendremos que esperar más de una hora para ver que la bebida esté a la temperatura que deseamos si tan solo la dejamos en la nevera y no hacemos nada más.

Muchas cervezas en los supermercados son organizadas fuera de las neveras y el refrigerador y enfriarlas puede hacer que duremos más tiempo del que queremos en poder consumirlas. Mucho más si estamos con amigos, en algún plan, y son muchas las que debemos enfriar. Si el calor apremia y tienes mucha sed y antojo de cerveza, verás que este truco para enfriarla es ideal y solo necesitas hielo y sal. Porque, efectivamente, no siempre el refrigerador resulta ser la opción más rápida.

Truco para enfriar la cerveza

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Como bien dicen los expertos, este es un viejo truco, pero de los que conocen las generaciones de nuestros abuelos y no tan conocido por la juventud actual. Puede parecer dispendioso pero la verdad es que para el efecto obtenido vale mucho la pena intentarlo, verás que te salvará en pocos minutos.

Este es un truco que utilizan muchos bares y restaurantes cuando están en apuros. Aunque no lo creas, en un balde con agua, hielo y sal, podrás poner las cervezas a enfriarse y verás que en pocos minutos lo lograrás, esto ocurre porque la sal ayuda a derretir el hielo de manera más rápida, por ello es que marcarán que las cervezas queden más frías en el menor tiempo posible.

Necesitarás:

• Hielo
• Sal
• Cubeta

Procedimiento

1. Agrega en un balde con varios hielos la cerveza. No lo hagas con agua.
2. Rocía algo de sal por encima de los hielos y verás lo rápido que se derriten.
3. Espera algunos minutos y luego ¡disfruta!