Esto es lo que puede pasar cuando se aguanta las ganas de orinar; tiene varias consecuencias

Muchas veces, las personas resisten la urgencia de ir al baño, ya sea por compromisos laborales, situaciones sociales incómodas o simplemente por descuido. Sin embargo, aguantarse las ganas de orinar puede tener consecuencias más allá de la incomodidad inmediata. Este hábito puede derivar en diversas complicaciones para la salud a corto y largo plazo.

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Consecuencias de aguantar las ganas de orinar

Retener la orina puede tener efectos negativos tanto a corto como a largo plazo para la salud, algunas de estas son:

A corto plazo:

1. Dolor y molestias: retener la orina puede causar incomodidad y dolor en la región abdominal y pélvica.
2. Infecciones del tracto urinario (ITU): la retención prolongada puede aumentar el riesgo de infecciones del tracto urinario, ya que las bacterias pueden multiplicarse en la vejiga.
3. Daño muscular: el músculo de la vejiga puede debilitarse si se somete a una presión constante debido a la retención crónica.

A largo plazo: 

1. Infecciones recurrentes: la retención frecuente puede contribuir a infecciones urinarias recurrentes, que pueden afectar los riñones si no se tratan adecuadamente.
2. Incontinencia urinaria: la retención crónica puede debilitar los músculos de la vejiga y aumentar el riesgo de incontinencia urinaria, donde es difícil controlar la liberación de orina.
3. Aumento de presión en los riñones: si la retención afecta la función normal de la vejiga y provoca reflujos hacia los riñones, podría aumentar la presión y afectar la salud renal.

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En conclusión, aunque puede ser comprensible que las circunstancias a veces nos lleven a postergar el acto de ir al baño, es crucial reconocer las posibles consecuencias que puede tener la retención de la orina. Desde molestias temporales hasta problemas de salud más significativos como infecciones recurrentes y disfunciones del sistema urinario, la importancia de atender las señales del cuerpo no puede ser subestimada.

Priorizar la salud y responder a las necesidades fisiológicas básicas es esencial para mantener un equilibrio adecuado en el organismo y en caso de experimentar problemas persistentes al orinar, se recomienda consultar a un profesional de la salud para una evaluación más detallada y un manejo adecuado.

*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Salud, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.