Con dos heridas de arma blanca terminó ciudadano en medio de robo en Transmilenio

Un nuevo caso de inseguridad vivieron los bogotanos cuando dos hombres intimidaron con cuchillos a los pasajeros que se encontraban en una de las rutas del sistema de transporte Transmilenio.

El incidente se viralizó en redes sociales, en donde diferentes usuarios manifestaron no solo su descontento por la situación, también hicieron un llamado a las autoridades para que garanticen la seguridad de Bogotá y en el transporte público.

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“Al ingresar a la estación Avenida Chile se presenta una situación donde unas personas intentan hurtarle el celular a un ciudadano que se opone al robo y en ese momento lo hieren con arma cortopunzante; sin embargo, la comunidad ayuda al joven herido y la Policía trata de ayudarlo, pero el afectado decide ir por sus propios medios a la Clínica Cardio Infantil donde fue atendido”, indicó el teniente coronel Javer Yerena, comandante de la Policía de Transmilenio.

El oficial también comunicó que en las 138 estaciones y los nueve portales del sistema hay alrededor de 538 auxiliares de Policía y más de 600 profesionales de la Metropolitana de Bogotá para brindar seguridad, informó RCN Radio.

La denuncia la hizo pública un usuario del sistema, quien capturó una imagen del joven en el articulado camino a la clínica mientras sangraba, tras las heridas que le ocasionaron los delincuentes en la estación.

Se conocieron imágenes del joven herido, pero Pulzo se abstiene de publicarlas.

Transmilenio: otros casos de la inseguridad que viven los usuarios

Las personas que utilizan el sistema a diario han venido denunciando que la seguridad en las estaciones y en los articulados es deficiente, también indican que han sido víctimas de la inseguridad que vive Bogotá.

“No me siento segura, Transmilenio es lo peor, pero no hay más opción, esta ciudad es un caos en la movilidad, aparte que lo manosean a uno, también lo roban si da papaya contestando el celular o chateando”, dijo una usuaria del sistema.

Todo indica que los uniformados que hacen parte del sistema masivo de transporte de la capital no son suficientes para combatir la criminalidad que viven los pasajeros.