Él es Óscar Hurtado, alcalde encargado de Medellín, luego de renuncia de Daniel Quintero

Es un hecho. A la Alpujarra llegará un nuevo alcalde tras la renuncia de Daniel Quintero, quien dejó a Medellín abandonada luego de días de rumores sobre su salida del despacho distrital. Según el decreto firmado por el presidente Gustavo Petro, Óscar Hurtado queda en encargo y seguirá desempeñando sus funciones como secretario de Gobierno.

Además de haber sido secretario de Hacienda en la Alcaldía de Medellín, Hurtado ha sido concejal y alcalde de Tarso, representante a la Cámara en dos periodos y contador del Fondo Ganadero de Antioquia.

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Óscar Hurtado se formó como contador público de la Universidad de Medellín y es especialista en gestión pública de la Universidad Cooperativa de Colombia. Pero más allá de eso, es un curtido político.

Si bien algunas fuentes aseguran que ingresó al gabinete de Quintero como cuota de Aníbal Gaviria cuando entre los dos mandatarios había una buena relación, otros sostienen que su ‘palanca’ es la primera dama, Diana Osorio.

En todo caso, Hurtado es del círculo de confianza de Quintero, al punto de que siendo alcalde lo dejó varias veces encargado de la ciudad. Una de las más recordadas fue entre el 15 y el 22 de abril pasado, mientras Quintero salió del país. Y dicen fuentes de La Alpujarra que eso correspondía perfectamente con una actitud de reciprocidad, porque cuando la Procuraduría suspendió a Quintero, Hurtado fue de los más febriles defensores.

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Nunca en la historia de Medellín un alcalde elegido por voto popular había abandonado su cargo, dejando a la ciudad en un alto grado de desgobierno. La renuncia de Quintero se conoció en la noche de este sábado tras 3 años y 9 meses que cerraron con él con la aprobación más baja de todo su mandato: solo el 28 % lo respalda, según la encuesta Invamer Poll de agosto.

En su último día en la Alpujarra, Quintero salió a la calle con una gorra a entregar volantes sobre el balance de su gestión. Su última jugadita como encargado de Medellín mientras corrían los rumores de renuncia, que terminaron siendo ciertos.