Proyecto para que expresidentes de Colombia no se metan en política: ¿broma o realidad?

Los senadores de la Alianza Verde Antonio Sanguino e Iván Marulanda presentarían una iniciativa que le prohíba a los expresidentes participar en política, un planteamiento que podría abrir recias discusiones en el país. Además, porque les impediría presidir partidos políticos, lo que sacaría de su cargo a un exmandatario. 

Acompañado de una fotografía riéndose con Marulanda, Sanguino afirmó en su cuenta de Twitter: “Hemos acordado con mi amigo y colega Iván Marulanda presentar un proyecto de ley que prohíba a los expresidentes participar en política y presidir partidos políticos”.

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La propuesta rápidamente se viralizó y algunos medios de comunicación hablaron con Sanguino sobre el eventual proyecto. Según explicó el senador, los expresidentes no asisten a la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores porque “siempre están peleando entre ellos”, de manera que no cumplen una labor de consejeros de Estado. 

En términos generales, el proyecto estaría encaminado a prohibir que los exmandatarios se inmiscuyan en asuntos políticos luego de dejar sus funciones en la Casa de Nariño. Principalmente, se buscará que no presidan partidos, como es el caso de César Gaviria en el Partido Liberal.

La iniciativa podría encender discusiones en todos los sectores políticos porque casi que actuaría como una mordaza contra los expresidentes. Sin embargo, parece estar lejos de la realidad. El senador Marulanda aseguró que se trató de una broma. 

Como la propuesta provocó tanto ruido, Sanguino expresó que podría pensarse en acordar esta inhabilidad contra los exmandatarios. “Estamos revisando la viabilidad jurídica de proponer una reforma constitucional para establecer una inhabilidad legal, por los menos para que los expresidentes no presidan los partidos”, dijo a Semana.

¿Se puede privar a los expresidentes de la política?

Negarle la posibilidad a los exmandatarios de meterse en asuntos políticos podría ir en contra de la Constitución. Además, resultaría inexplicable que excombatientes de grupos armados tengan voz y voto en política y los expresidentes no, comentaron en Caracol Radio. “Jurídicamente no tiene ningún asidero”, explicaron. 

En caso de presentarse el proyecto, debería ser aprobado antes de finalizar el periodo legislativo, pues ni Sanguino, ni Marulanda, fueron reelegidos en las últimas votaciones.