Así estarían los delincuentes metiendo fentanilo a los sitios de rumba; hay preocupación

La presencia de fentanilo en Colombia sigue arrojando pistas. En el Valle de Aburrá se conocieron hace tres semanas los primeros dos ingresos de pacientes a servicios médicos por complicaciones derivadas del consumo de fentanilo mezclado con tusi.

Hace poco más de una semana, en medio del Cuarto Congreso Internacional contra el fentanilo, sustancias químicas y nuevas sustancias psicoactivas que se realizó en Medellín, el presidente Gustavo Petro lanzó otra alarma al asegurar que la información que tienen las autoridades indica que el fentanilo está penetrando en varios de los sitios de rumba más concurridos en las principales ciudades.

(Lea también: Pillaron a pareja llevando droga oculta en su carro; los capturaron y judicializaron)

“En estos sitios de rumba, donde se vende la marihuana, la cocaína o el tusi, que es la última moda, es donde estarían buscando combinar el fentanilo sin que la gente lo sepa y eso traería la captura de un mercado por el alto poder adictivo de esta droga, según lo ha descrito la ciencia”, dijo el máximo mandatario.

Hay que decir que de los dos casos confirmados de intoxicación por fentanilo, uno de ellos manifestó haberlo hecho conscientemente al pedir tusi mezclado con esta sustancia, mientras que el otro paciente dijo que consumió tusi contaminado sin saberlo.

Por todo esto, Petro solicitó al Ministerio a través de la secretarías de Salud que se instalen en los sitios de rumba de las ciudades puntos seguros para detectar la presencia de fentanilo. La idea del mandatario es garantizar espacios de confianza para promover la prevención frente al consumo de esta droga, una propuesta que expertos en gestión y reducción de riesgos en consumo de drogas, como Échele Cabeza, consideran no solo viable sino necesaria.

En la capital antioqueña se estima que algunas estructuras ya habrían ingresado a los sitios de rumba para vender esta sustancia, aunque sus consumidores aún no lo sospechen.

Investigadores judiciales que están tras la pista del fentanilo aseguran que los delincuentes estarían priorizando los sitios de rumba frecuentados por extranjeros para hacer su incursión con el tráfico de fentanilo en la ciudad. Específicamente, en El Poblado y Laureles, aunque no descartan otros puntos donde también hay muchos sitios de rumba como las carreras 68, en Castilla, y 45, en Manrique.

Los dos intoxicados en Bello atendidos en la Soma y algunos hallazgos en operativos recientes indican, según los investigadores, que el fentanilo está siendo mezclado, principalmente con tusi.

Luis Fernando Quijano, representante de la Corporación para la Paz y el Desarrollo (Corpades), señaló que incluso la estarían recategorizando, de acuerdo con su impacto.

“Actualmente hay dos tipos de tusi, el real, que es la cocaína rosada, y el que llaman brutal, que es mezclado con fentanilo. Incluso, estarían echándole ketamina y de ahí lo tuestan echándole fentanilo y a partir de ahí sacan esta nueva versión de tusi”, explicó el experto en conflicto.

Pero esta no sería la única modalidad de suministro de esta sustancia. También se estaría presentando, principalmente, en las fiestas electrónicas, con el consumo de la llamada Bombona, que consiste en mezclar unas gotas de este fármaco con bebidas energizantes o hidratantes.

Se trataría de un consumo consciente por parte de la persona y el costo podría estar entre los $ 300.000 y los $ 500.000, la dosis, conformada por tan solo unas gotas de este fármaco, usado clínicamente para el control de fuertes dolencias.

Las autoridades no tienen indicios de que en los sitios de rumba de la ciudad se está consumiendo esta droga inyectada, como sí ocurre de manera extendida en Estados Unidos. El fentanilo es una droga 50 veces más adictiva que la heroína y 100 veces más que la morfina y y el país todavía está a ciegas sobre este fenómeno.

Según la Secretaría de Salud de Medellín, actualmente no se cuenta con las pruebas de laboratorio suficientes para saber cuántas personas se vieron expuestas a esta sustancia. No existen actualmente protocolos para detección de consumo de fentanilo puro lo que impide atender con celeridad a pacientes.

(Vea también: Desarticularon al grupo delincuencial ‘Los Santa’; vendían hasta bazuco en una comuna)

¿Quiénes venden la droga?

Las autoridades tienen dos tipos de distribuidores de esta sustancia: por un lado se encuentra el grupo delincuencial ‘los Chatas’, de Bello, aunque también se habla de otras organizaciones que tendrían alto poder económico para conseguirlo.

“Hay gente detrás de esto que se ha denominado los ‘pupy narcos’, gente joven, de familias pudientes, que encontraron en esta sustancia un poderoso negocio”, dijo Quijano. Incluso, afirmó, que estarían desligados completamente a las estructuras delincuenciales tradicionales que han estado inmiscuidas en el tráfico de estupefacientes.