Sacan del cargo a mayor del Ejército que habría abusado a una soldado en un batallón

Un sargento retirado del Ejército denunció que su hija, una soldado que presta servicio militar voluntario en el Batallón de infantería de Ayacucho en Manizales (Caldas), fue abusada por un mayor de esa institución. Por el presunto hecho, el uniformado fue retirado de su cargo mientras que la Fiscalía, Medicina Legal y la Justicia Pena Militar adelantan la investigación.

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El presunto hecho, denunciado en la revista Semana por el padre de la joven, da cuenta de que el mayor del Ejército sacó a la soldado y a una de sus compañeras del batallón y las llevó a la zona rosa de Manizales. Allí, según el relato del militar en retiro, les habría ofrecido bebidas y, de acuerdo a lo dicho por su hija, no recuerda nada hasta el día siguiente cuando amaneció en la habitación del uniformado con signos de abuso.

Tras conocer los hechos, manifiesta el Ejercito, “se activó la ruta púrpura, y la joven fue resguardada, protegida y trasladada a un centro hospitalario para su atención, así como se garantizaron los medios para hacer efectiva la denuncia”. Aún así, el padre de la joven manifiesta que se enteraron tiempo después de que su hija fue incapacitada por el presunto abuso

El mayor, a quien señalan de ser el agresor, fue relevado de su cargo mientras que avanza la investigación de los hechos. “Una vez se conozcan las decisiones judiciales emitidas por las autoridades competentes, serán acatadas como corresponden”, expresó la institución castrense.

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De igual manera, el Ejército sostiene que “dando aplicación a la ruta de acompañamiento y de apoyo, se delegó un equipo interdisciplinario para brindar orientación e información a la familia sobre los mecanismos de protección integral y rutas para hacer efectivo los servicios disponibles para su atención”.

De la misma manera, afirman que en todo momento se “ha mantenido el acompañamiento y la comunicación constante con la familia de la presunta afectada”. El comunicado de la institución finaliza asegurando que “la Institución no tolera ningún acto de violencia que vaya en contra de cualquier ser humano, con mayor énfasis de los sujetos de especial protección constitucional”.