Dos bares (famosos en Medellín) funcionan en sitio que era de narcos: están en escándalo

Dos emblemáticos bares de Medellín están en el ojo del huracán por cuenta del manejo de los bienes de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), el escándalo que destapó el propio presidente Gustavo Petro. Dichas discotecas actualmente funcionan en lotes que antes le pertenecían a narcos, de acuerdo con lo que reveló Revista Semana. 

La inmensa zona tiene una extensión de 11.000 metros cuadrados y está ubicada en el exclusivo sector de El Poblado, uno de los lugares más apetecidos para comer y rumbear en Medellín. Dicho predio, en los años noventa, perteneció al clan mafioso de los Ochoa, que lo adquirió como un lote de engorde, pero que con el paso de los años se volvió un lugar muy apetecido para el comercio.

La propiedad está en manos de la SAE y allí funcionan dos prestigiosas discotecas, ‘La Chula’ y la ‘Fonda, la Chismosa’, además de un parqueadero público. En 2013, dicha entidad le arrendó a Juan Guillermo Tirado Tobón por 9’400.000 millones pesos mensuales; sin embargo, a finales de 2021, el empresario empezó a darse cuenta de un interés inusual de la oficina regional de Antioquia por retirarle la administración del bien.

Según la investigación de la citada revista, en dicha entidad hay todo un festín que se estarían dando quienes dirigen actualmente la SAE, desde políticos camuflados y mafiosos que aún mandan sobre las propiedades. 

Entre los señalados se destaca un senador de Antioquia que estaría detrás de la repartija de bienes de los narcos con fichas en esa oficina regional, además de un gobernador que aparentemente hace fiestas en una finca incautada a un mafioso; una exalcaldesa de Quibdó que tiene a su familia viviendo en una vivienda incautada a la mafia y una asociación de campesinos que tendría una estrategia para apropiarse de manera irregular de bienes y vehículos.

En general, se ha encontrado que en el poder detrás de estos bienes hay testaferros aquí y allá, y un inventario incompleto por el que nadie responde hace años. Billones de pesos están en juego. “Podría ser un hecho de corrupción nunca antes visto”, dijo el presidente Petro al respecto. 

Discotecas en Medellín afectadas por escándalo de la SAE

Pues bien, en el tema puntual de las discotecas, la SAE ordenó la retirada de los negocios que funcionan en el lote, asegurando que se han demorado en los pagos; sin embargo, el representante legal interpuso una tutela y el Tribunal Superior de Medellín falló a su favor en segunda instancia, el 7 de junio, y le ordenó a la entidad “abstenerse de efectuar el desalojo”. 

Pero todo no acabó ahí, ese mismo día se celebró un contrato de mandato sin representación con Luis Fernando Castaño Marín, un comerciante de jeans del sector del ‘Hueco’, en Medellín, por 41 millones de pesos más IVA mensualmente, y por cinco años.

(Vea también: Regresan alumbrados navideños al río Medellín luego de ocho años: cuál será el recorrido)

El citado medio habló con los propietarios de las discotecas. Uno de ellos le paga a Castaño 50 millones de pesos mensuales. El otro le paga entre 30 y 40 millones de pesos cada 30 días. Todo este conflicto está siendo investigado por el Gobierno Nacional, que tiene sus ojos puestos en los funcionarios que han trabajado en la SAE y los políticos salpicados en dicho escándalo.