Destapan 4 pistas secretas que filtraron a sicarios para atentar a Miguel Uribe en Bogotá

Luego del atentado sufrido por el senador y aspirante presidencial Miguel Uribe Turbay el pasado sábado 7 de junio de 2025, surgen numerosas incertidumbres alrededor del hecho, especialmente por la presunta filtración de información sensible que habría favorecido a los responsables. Las autoridades y organismos de protección han enfocado sus esfuerzos en esclarecer si existió una fuga de datos confidenciales que permitieron a los sicarios planear y ejecutar el ataque con alto nivel de detalle.

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El atentado contra Miguel Uribe Turbay ha puesto en alerta tanto a la Unidad Nacional de Protección (UNP) como a la Policía Nacional, encargadas de resguardar la seguridad de figuras públicas en Colombia. El presidente Gustavo Petro ya había revelado que Uribe Turbay era objeto de seguimientos, incluyendo a su núcleo familiar. Sin embargo, según indicó El Tiempo con apoyo de fuentes de inteligencia, los investigadores consideran probable que información reservada sobre horarios, rutas y esquemas de protección del senador, fue entregada a los sicarios.

En respuesta a este hecho, la UNP bloqueó el acceso a la carpeta con los detalles del esquema de seguridad de Uribe Turbay, la cual contiene nombres de escoltas, vehículos blindados, bitácoras y turnos. Esta carpeta ahora solo puede ser consultada por personal autorizado, y se están revisando los registros para identificar posibles accesos no justificados que pudieran haberse realizado previo al ataque.

La Policía Nacional también está en la mira, ya que lideraba el dispositivo de protección del senador. Las autoridades revisan si algún miembro del componente policial o externo a la UNP pudo filtrar información o conocer aspectos sensibles de la rutina del político bogotano.

Aunque se difundió la versión de que el evento político en Modelia había sido decidido de forma espontánea, los acompañantes de Uribe Turbay afirmaron que sí estaba programado, aunque la visita a un parque cercano fue improvisada. Este detalle es clave, pues cámaras de seguridad captaron al menor de 14 años implicado en el ataque, horas antes del hecho, conversando con otros sujetos y haciendo llamadas desde su celular. La presencia del joven, antes de la llegada de Uribe Turbay, refuerza la sospecha de que los sicarios recibieron información precisa sobre los movimientos del senador.

Testigos y registros audiovisuales evidencian además que, tras el atentado, al menos dos adultos agredieron violentamente al menor, lo cual sugiere que otorgarle el papel de victimario era parte de una estrategia más amplia. Uno de los adultos involucrados ya habría sido identificado por la Fiscalía.

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Otro aspecto de interés para los investigadores es el origen del arma utilizada. Se trata de una pistola adquirida legalmente en Estados Unidos por Charles Joe Anderson, de 75 años, sin reporte de pérdida o robo, lo que añade complejidad al caso. 

Hasta el momento, las pesquisas continúan bajo la supervisión de la Justicia Penal Militar. El país espera respuestas sobre quién filtró los datos, cómo falló el esquema de seguridad y cuál fue la verdadera motivación detrás del atentado a Miguel Uribe Turbay.