En Ibagué fue aprobada política pública de bienestar y protección animal

El concejal Javier Mora, dio a conocer a través de un video publicado en su cuenta de Facebook, que fue aprobada en el Concejo Municipal, la política pública de bienestar y protección animal.

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En su mensaje, el cabildante expresó que esta iniciativa se configura como un gran paso en cuanto al mejoramiento de la calidad de vida de los animales en Ibagué, ya que a partir de ahora, estos seres sintientes podrán gozar de verdaderos beneficios que por años les habían sido esquivos.

“Esto es una muy buena noticia para los animalitos de Ibagué, y vienen muchas cosas más, con esto vamos a lograr mejorar las adopciones, esterilizaciones y todas las condiciones que tienen que ver con la atención del estado hacia la población animal”, manifestó Mora.

En este sentido, únicamente haría falta que este proyecto sea sancionado por el alcalde Andrés Hurtado para que se convierta en ley.

El concejal detalló que desde el 2016 se ha venido trabajando en este proyecto de acuerdo. Mora sostuvo que ha elevado su voz en reiteradas ocasiones en el Concejo de Ibagué para tratar temas de bienestar y protección ambiental.

“Esta política pública era uno de los reclamos que hacíamos. Llevó más de 15 debates de control político a la Administración Municipal desde el 2019”, señaló el cabildante.

A su vez, Mora indicó que dentro de la gama de temas relacionados con el bienestar de los animales de la ciudad, se logró el inicio de la construcción de las nuevas instalaciones del Centro de Atención y Protección Animal, denominado Mega Capa, así como procesos de esterilización, adopción, atención veterinaria a animales en condición de calle y pertenecientes a familias de estratos 1 y 2.

El concejal resaltó que con la política pública se mejorará significativamente en la prestación de servicios de bienestar y protección que involucren a la población animal de Ibagué y con la política pública, mejorar esterilizaciones, adopciones, atención veterinaria a los animalitos en condición de calle y en familias de los estratos 1 y 2.

Según explicó Mora, la política pública de bienestar y protección animal pretende ser la herramienta normativa que plantee los lineamientos a seguir.

Asimismo, este mecanismo servirá para que la Administración Municipal oriente sus inversiones y acciones que busquen el beneficio de la población animal ibaguereña y se les mejore su atención.

Javier Mora aseguró que con esta política pública, al abarcar todo el marco normativo en cuanto a la protección de los derechos de los animales, evitando su maltrato, se le realizará una juiciosa veeduría al evento de cabalgata enmarcada en el festejo del Festival Folclórico.

“Vamos a estar muy pendientes de que esta cabalgata que se va a hacer, para que esta no se preste como un escenario de maltrato, que es lo que yo he advertido como concejal en varias oportunidades”, acotó Mora.

El concejal advirtió que la política pública es un instrumento de planeación para evitar casos de maltrato animal, y en este sentido, la Administración Municipal deberá ser muy cuidadosa a la hora de tomar medidas preventivas de peso para la realización de la mencionada cabalgata.

Daniela Arango, veterinaria y activista miembro de la fundación Kinkajou Yanapax, organización dedicada a la labor humanitaria y el desarrollo de actividades sociales y ambientales, resaltó la importancia de la implementación de esta política pública en la ciudad.

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La animalista sostuvo que dentro de los múltiples aspectos que se deben fortalecer para el bienestar y protección de los animales en Ibagué, es fundamental el fortalecimiento de los procesos de esterilización, algo que ayudaría en la disminución en la sobrepoblación de animales callejeros, así como la propagación de enfermedades, peleas, accidentes y demás situaciones que puedan generarse por estos animales.

“Muchas personas carecen de responsabilidad a la hora de tener una mascota en buenas condiciones, dejando de lado los servicios veterinarios”, señaló Arango, y sumó: “Importante esta atención a los estratos más bajos, ya que muchas personas que demuestran su amor por los animales, no cuentan con el acceso económico para brindarles un mayor cuidado”.