Trágico accidente: bus (estilo Transmilenio) se partió en dos luego de ser arrollado por un tren

En la madrugada de este 31 de julio en Curitiba, Brasil, pasajeros de un bus vivieron un aterrador suceso. Un tren partió en dos el vehículo en el que se transportaban.

Según reportó Transporte Colectivo Glória, empresa a la que pertenecía el autobús, el vehículo se encontraba con 25 pasajeros a bordo en el momento del dramático accidente. “El chofer del bus ignoró las advertencias de proximidad del tren, lo que resultó en un violento impacto que literalmente separó el vehículo en dos”, declararon fuentes de la empresa a los medios locales.

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Uno de los pasajeros Maurício Golinsqui relató su aterradora experiencia en el accidente. En entrevista con O Globo, describió: “Corrí hacia el acordeón para intentar escapar, pero chocé con una varilla de hierro que lo ralentizó, lo cual tal vez me salvó la vida. Me quedé con las piernas fuera del autobús, colgando, viendo pasar el tren delante de mí… y pensaba: ‘¡Me muero!'”.

Afortunadamente, de las 25 personas presentes en el bus, solo se reportaron 11 heridos con lesiones leves o moderadas por la empresa de transporte y la unidad de Urbanización de Curitiba (URBS). Todos los heridos fueron rápidamente atendidos en hospitales cercanos.

Pese a la magnitud del accidente, no se registraron fallecidos. El suceso fue ampliamente divulgado en redes sociales y medios de comunicación, causando conmoción tanto en la ciudad de Curitiba como en el resto del país. Reflejó la importancia de reforzar la seguridad en los cruces ferroviarios, especialmente en zonas urbanas con obstáculos que pueden reducir la visibilidad.

De acuerdo con El Tiempo, las causas preliminares del accidente apuntan a la negligencia del conductor del bus, quien presuntamente ignoró las señales de advertencia de un tren próximo. Sin embargo, el operador aseguró en un comunicado que su visión estaba obstaculizada por árboles y edificaciones, lo que le impidió ver y escuchar a la locomotora a tiempo para evitar el choque.

Los cruces ferroviarios en zonas urbanas siempre han planteado dilemas de seguridad debido a la alta posibilidad de accidentes. A menudo, estos puntos de intersección están rodeados de vegetación y construcciones que limitan la visibilidad de los conductores y aumentan la probabilidad de colisiones.