Niña que recibió disparo de su madre murió y su padre envió sentido mensaje: "Devastado"

Después de cinco días de lucha en un hospital de Utah, Olivia Blackmer, la niña de siete años que recibió un disparo en la cabeza a manos de su madre, falleció el pasado domingo 16 de febrero. La menor había sobrevivido inicialmente al ataque, en el que su madre asesinó a sus tres hermanos, incluyendo un bebé de pocos meses de vida, antes de quitarse la vida.

La trágica historia de Olivia conmovió al mundo, ya que, pese a la gravedad de sus heridas, mostró signos de respuesta en sus últimos días, lo que llenó de esperanza a su familia y a quienes siguieron su caso. Su padre, Quinn Blackmer, quien había pedido oraciones por su recuperación, expresó su dolor con un conmovedor mensaje tras su fallecimiento.

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El doloroso mensaje de su padre de niñas asesinadas por su madre

El impacto de la tragedia dejó al padre de Olivia devastado, pero con el consuelo de que sus hijos ahora descansan juntos.

“Me siento en paz al saber que mis bebés no tienen que estar separados unos de otros y que pueden estar con sus otras hermanas”, expresó Quinn Blackmer.

Días antes, Quinn había pedido a la comunidad que orara por Olivia, aferrándose a la esperanza de un milagro. Según su testimonio, la niña respondía de manera inexplicable a ciertos estímulos, como cuando movía los dedos al escuchar la canción religiosa “I’m a Child of God”.

Madre acabó con la vida de sus 4 hijas ¿Qué pasó?

Las autoridades recibieron una escalofriante llamada al 911 alrededor de la 1:30 p. m., en la que una mujer con voz inquietante reportó que había disparos dentro de su casa y que sus hijas habían sido baleadas. En su mensaje, también indicó la ubicación exacta de los niños y lo que estaba a punto de hacer.

Cuando la policía llegó a la residencia, encontró a Tranyelle Harshman, madre de 32 años y autora del crimen, en el piso superior con una herida de bala autoinfligida. Aunque aún estaba con vida, murió poco después de ser trasladada al hospital. Sus tres hijos fueron hallados sin signos vitales, mientras Olivia aún respiraba, aferrándose a la vida.

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Tras la muerte de su hija, Quinn Blackmer expresó su gratitud por el apoyo recibido a través de una campaña en GoFundMe, que hasta el lunes había recaudado más de 108.000 dólares.

“Desde el fondo de nuestros corazones, queremos agradecer a cada persona que ha donado, rezado y ayunado por nosotros, nuestra familia y nuestra hermosa Olivia”, escribió en la plataforma. “Su amabilidad y generosidad significan mucho, y solo les pedimos que continúen orando y nos mantengan en sus pensamientos”.