El verdadero Tarzán vivió 41 años en la selva de Vietnam junto a su padre

La historia de estos dos hombres en la selva comenzó cuando Thanh decidió escapar de su pueblo en 1972, para huir de la guerra que ya había acabado con la vida de su esposa y sus otros dos hijos, informa el diario británico The Sun.

Lang era entonces un niño de 2 años, por lo que mientras estuvo en la selva no sabía muchas cosas de la civilización más allá de las historias que su padre le contaba sobre los aviones que veían en el cielo, y ni siquiera sabía de la existencia de las mujeres.

También le puede interesar:

• Escuchó a mujer que engañaba a su novio y la delató en Facebook
• Reo se fuga de cárcel, pero hambriento y cansado decide entregarse

De acuerdo con el International Business Times, durante todo ese tiempo Thanh creía que la guerra continuaba, por lo que cada vez que los pueblos cercanos se expandían, ellos se mudaban más adentro de la selva, y cuando se le acercaban personas, escapaban.

Thanh y su hijo fueron ‘rescatados’ en 2013 por habitantes locales, ya que la salud del padre estaba muy deteriorada, y desde entonces han estado tratando de adaptarse lentamente a la civilización y actualmente viven en una casa cerca de la jungla.

En noviembre pasado, Alvaro Cerezo, director de Docastaway, una compañia que ofrece vacaciones a lugares remotos del mundo, fue a encontrarse con Lang porque quería preguntarle sobre técnicas de supervivencia, pero al conocerlo decidió pasar 5 días con él viviendo en la selva.

Cerezo relató su experiencia en su blog y allí explicó que la mente de Lang era como la de un niño de 1 año en muchos aspectos, algo que los psicólogos que lo han visto ya han confirmado.

Lang también tiene dificultades para entender el vietnamita, ya que siempre se ha comunicado con su padre usando unas pocas palabras de un dialecto local. A pesar de su limitada competencia en el idioma, a Lang le gusta mucho pasar varias horas al día viendo televisión.

Temas relacionados:

• El baile de este pequeño vietnamita le sacará un par de carcajadas
• ¿Hace turismo de naturaleza? Tenga en cuenta estos 8 detalles