Escrito por:  Redacción Vivir Bien
Dic 11, 2023 - 6:17 pm

En el inmenso espacio, los satélites flotan en órbita desafiando la fuerza de la gravedad terrestre. La pregunta es ¿por qué estos objetos no se caen a la Tierra?, la respuesta se encuentra entre la física y la ingeniería espacial.  

Determinar el lugar perfecto en la órbita terrestre para un satélite no es algo que se pueda hacer a ojo. Se necesitan cálculos precisos. Los científicos hacen estudios detallados para encontrar el punto exacto para que las condiciones sean ideales, y el satélite funcione correctamente. 

(Vea también: ¿Por qué las estrellas tienen brillos intermitentes? Misterio detrás de este espectáculo)

¿Qué es y para qué sirve un satélite? 

Según European Space Agency, estos objetos pueden ser naturales o artificiales que orbitan alrededor de otro más grande. Por ejemplo, en el universo hay asteroides o satélites como las lunas que giran alrededor de planetas o estrellas. A la vez, hay artificiales, que son utilizados para enviar y recibir comunicaciones de uso masivo como televisión, Internet, y más pero también sirven como educación científica.  

Por ejemplo, la Nasa lanzará un satélite al espacio que promete cambiar los vuelos espaciales. Se trata de LignoSat, fabricado con madera de magnolia, convirtiéndose en una opción más sostenible, debido a que se volverá ceniza cuando regrese a la Tierra. 

(Vea también: Se acerca la Luna Fría de diciembre 2023: fecha y hora para verla)

¿Por qué los satélites se mantienen fijos en el espacio?  

Cuando se lanza un satélite al espacio es necesario que alcance una velocidad muy rápida para vencer la fuerza que lo atraería de vuelta a la Tierra, como si se jugará a lanzar algo lejos. La clave es darle exactamente la velocidad adecuada para que llegue a un punto específico en su órbita, donde su velocidad sea horizontal al planeta y se genere una fuerza que tire hacia afuera, llamada fuerza centrífuga. 

Según National Geographic, la fuerza centrífuga es la sensación cuando se gira con alguien de la mano y se siente que algo lo quiere separar. Ahora bien, en el caso de los satélites, cuando su velocidad es horizontal, equilibran la gravedad con la fuerza centrífuga, y ahí es donde pueden quedarse dando vueltas. 

Esta fuerza centrífuga equilibra la gravedad, y es gracias a este equilibrio que el satélite puede mantenerse en órbita. Por otro lado, la inercia es fundamental, es la tendencia de un objeto a seguir moviéndose de la misma manera; esto ayuda al satélite a mantener su velocidad constante, creando un equilibrio dinámico, es una mezcla de velocidad, masa y gravedad. Sin embargo, National Geographic indica que esto se pude alterar con el sol, porque el aire que este tiene puede hacer que cambie la dirección.  

Lee todas las noticias de vivir bien hoy aquí.