La boca es una parte del cuerpo que requiere de cuidados especiales para evitar infecciones u otros padecimientos, es por eso que los odontólogos recomiendan tener cuidados exhaustivos con ésta; además, una de sus partes más importantes es la lengua, un órgano muscular que podría incluso dar señales de enfermedad.
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La lengua, por definición, es un órgano muscular situado en la cavidad de la boca de los vertebrados y que sirve para gustar y deglutir, así como para modular los sonidos; es decir, su función es muy importante, pues nos ayuda no sólo a comer, sino a poder establecer comunicación verbal.
¿Cómo se compone la lengua?
Según información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la lengua está compuesta principalmente por músculos, y está cubierta con una membrana mucosa. Por su parte, pequeños nódulos de tejido llamados papilas cubren la superficie superior de la lengua; mientras que entre las papilas se encuentran las papilas gustativas.
Las papilas gustativas son precisamente las encargadas de proveer la sensación del gusto, pues son las que detectan los sabores y envían esa información al cerebro. Pero además del gusto, la lengua cuenta con una membrana mucosa húmeda que ayuda a la formación del bolo alimenticio y su deglución.
¿Cómo es que la lengua podría indicar algún padecimiento?
La revista Harvard Health Publishing hizo una publicación en la que explica que la lengua puede presentar indicios de enfermedad de acuerdo al color y la apariencia que tenga, es decir que presenta signos de problemas en la salud. Por esta razón, el estudio recomienda estar pendiente de los signos y acudir al médico en caso de que se presente alguno de los siguientes síntomas:
- Lengua color café o negra: cuando este órgano muscular se torna de color café o negro se le denomina al padecimiento “lengua negra peluda”, lo cual ocurre cuando las papilas llegan a alargarse demasiado, aunque regularmente estos bultos no llegan a crecer porque se desprenden por la actividad en la boca.
Sin embargo, si llegan a crecer, estos podrían atrapar bacterias y una mezcla de diferentes colorantes alimentarios, lo que termina provocando que la lengua se vuelva de color café o negro. Entre los factores de riesgo se encuentran la toma de antibióticos o antihistamínicos, fumar, sequedad de boca, beber mucho café o té negro, o tener mala higiene bucal.
- Manchas o llagas de color blanco: cuando aparecen estas marcas en la lengua podría significar que hay un crecimiento excesivo de levadura en la boca, lo que puede indicar candidiasis, una enfermedad que entre sus causas tiene afecciones como la diabetes o el VIH, efectos secundarios de antibióticos o tratamiento del cáncer.
Otra causa podría ser el uso de dentaduras postizas, fumar, sequedad en la boca o uso de inhaladores de esteroides; sin embargo, en casos muy extraños, las manchas o llagas blancas podrían indicar síntomas de cáncer oral.
- Llagas dolorosas rojas o amarillas: esto se debe posiblemente a aftas (tejidos irritados) o, en casos raros, cáncer oral.
- Color rojo brillante: este tono en la lengua indica falta de vitamina B12 o la infección llamada “escarlatina”, que es causada por una bacteria en la garganta que está acompañada de sarpullido rojo en el cuerpo; aunque en el caso de que estas manchas no duelan y parezan migrar a otros lados de la lengua, se puede tratar de una afección inofensiva llamada “lengua geográfica”.
Los expertos de la salud bucal recomiendan que, en caso de presentar alguno de estos colores o síntomas en la lengua, se debe acudir al médico para que realice una revisión exhaustiva y los estudios que se necesiten.
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