Si usted es uno de los que vive con temor por los problemas de seguridad de los que tanto se queja la gente que usa WhatsApp, esto le dará mayor tranquilidad. La aplicación, después de varios años de funcionamiento, implementó el cifrado total (end-to-end).

Esto se traduce en que el contenido que circule a través de la herramienta solo podrá ser administrado por usted y nadie, diferente al contacto que usted desee, podrá acceder a él.

La novedad de WhatsApp, indica Wired, también es extensible a su servicio de llamadas y, además, aplicará para los mensajes que se compartan en los grupos.

Esta función permitirá también que, cuando los usuarios de un grupo tengan instalada la misma versión de WhatsApp, se puedan cifrar de forma automática los mensajes, videos, audios e imágenes que se intercambien. Sin embargo, hay que esperar a que todos tengan acceso a la última actualización de la ‘app’.

Entre los objetivos que tendría la herramienta con este gran cambio se destaca mejorar la seguridad de sus usuarios y evitar el espionaje que se da a través de este tipo de herramientas. Según la compañía, ni sus empelados podrán tener acceso a los contenidos.

El cifrado, explica Android4all, se lleva a cabo con una clave que no está al alcance de cualquiera.

“El cifrado entre puntos, podemos decir a grandes rasgos que consiste en que, en caso de que una tercera persona consiguiese intervenir nuestras comunicaciones, no podría leer los mensajes, ni ver el contenido multimedia que circula entre el emisor y el receptor”, explica Sergio Agudo, bloguero de Android4all.

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