La primera vez que se supo de la existencia de este teléfono fue en 2014. Sin embargo, aquella vez, la pantalla de arranque no funcionaba.

Un año después, las piezas del celular se caían, y ahora parece que todos los errores se han solucionado y ARA por fin llegará a las vitrinas en 2017.

El dispositivo realmente funciona como un rompecabezas al cual se le pueden cambiar de lugar sus piezas sin que deje de servir. Además de su comprobado éxito, Google mostró que ya no es necesario reiniciar el teléfono si se quiere, por ejemplo, mover la cámara de determinado lugar.

Para retirar uno de los módulos, basta con decirle “Ok, Google, expulsa la cámara”, por poner un caso, informa Wired; de igual forma, este es el primer dispositivo que Google produce sin ayuda externa, como sí sucedió con el Nexus, precisa The Verge.

Los teléfonos modulares no son una novedad del todo; LG ya lo había propuesto con su LG G5, pero ahora, el de Google dejará a los usuarios la libertad de elegir los colores y las combinaciones que desee.

Este video muestra el funcionamiento del smartphone en diferentes contextos:

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