Yaneth Molina les escribió una sentida carta a sus compañeros operadores de la Aerocivil, en la que también les dice que para ella resulta “reconfortante” saber que aún en “este medio tan difícil” cuenta con el apoyo de ellos.

“Compañeros, por mi familia y por este trabajo que valoro y respeto, puedo afirmar con absoluta certeza que de mi parte hice lo humanamente posible y lo técnicamente obligatorio para conservarles la vida a esos usuarios del transporte aéreo”, dice Molina en su misiva.

La voz de Molina le ha dado la vuelta al mundo luego de que se difundiera en las últimas horas el audio del dramático contacto que sostuvo con el piloto de la aeronave, que le pedía urgentemente los vectores para aproximarse a la pista del aeropuerto de Rionegro (Antioquia).

Pero asegura que “lamentablemente” sus esfuerzos “resultaron infructuosos por las razones que son de todos ustedes conocidas”. Y agrega: “Hoy la vida me puso en esta poco agradable posición de haber tenido que enfrentarme a una situación como la del 28 pasado, situación que por nuestro trabajo nos vemos expuestos todos los días, todos los turnos”.

“Esta vez me correspondió a mí, y reitero ante ustedes que me han manifestado su apoyo que todo cuanto hice con la frecuencia fue para preservar la integridad de todos los ocupantes de esas dos aeronaves, principalmente, y por ende de los ocupantes de las otras aeronaves que estaban bajo mi responsabilidad”, añade la operadora.

Aunque manifiesta que ha recibido mensajes de fortaleza y acompañamiento de todos los rincones del país “en este difícil momento de mi vida profesional”, advierte que “lamentablemente” ha conseguido que “personas ignorantes y ajenas a este oficio, y sobre todo que ignoran los procedimientos, amenacen mi integridad física y mi tranquilidad personal, por lo que he estado analizando soluciones al respecto, las cuales espero discutir con las directivas de la entidad”.

Molina agradece “con el corazón” el apoyo recibido. “Nuestro trabajo es tan especial que hoy me puso en esta circunstancias de modo, tiempo y lugar para enfrentarme a la rudeza de la realidad que resultó de este impase”.

Esta es la carta:

Pulzo

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