Rápidamente, se apagó el ‘videotron’, como se conoce localmente a las pantallas gigantes de publicidad, pero no antes de que el escandaloso incidente fuese captado por los teléfonos de los motoristas, quienes lo publicaron en las redes sociales.

La etiqueta ‘videotron’ se convirtió rápidamente en un tema del momento, mientras crecían las especulaciones sobre quién podría ser el responsable de la difusión del video, a sólo unos pasos del despacho del alcalde de Yakarta Sur.

Al parecer, el archivo de video, titulado ‘Mira al Tokio caliente’, fue retransmitido desde un ordenador personal, aunque la policía sigue buscando un móvil detrás del escándalo, según un comunicado de la policía metropolitana publicado el sábado.

En la investigación también participa una unidad especializada en crimen cibernético para averiguar si la difusión del video fue deliberada o si fue fruto de un acto de piratería, dijo Awi Setiyono, directora de las relaciones públicas de la policía.

La policía ha incautado un ordenador de las oficinas de una compañía privada en el marco de la investigación, añadió.

El acceso a páginas web pornográficas está bloqueado en Indonesia, un país de mayoría musulmana, y las escenas románticas de películas y programas de televisión suelen ser censuradas por el Estado.

AFP

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