De igual manera, Sivananda sostiene que tampoco come especias y que practica yoga todos los días. Además, el centenario hombre duerme en una estera en el piso y tiene por almohada un bloque de madera, informa Indy100.

El monje nació el 8 de agosto de 1896 y creció en medio de la pobreza en la Bengala Occidental, en India. Allí sus padres murieron antes de que él cumpliera 6 años. Luego de eso, Sivananda se trasladó a Varanasi, donde decidió que se convertiría en monje.

Llevo una vida simple y disciplinada. Como cosas muy sencillas, solo comida hervida sin aceite o picante”, afirma.

A pesar de su edad, Sivananda no adolece de enfermedad alguna. De hecho, según Times of India, aunque no puede ver cosas desde lejos, no necesita gafas para leer. De igual forma, se vale por sí mismo y hasta es capaz de viajar solo en tren.

Por supuesto, al momento de su nacimiento, en India no había electricidad, ni carros, ni teléfonos, y afirma que no se siente atraído por las nuevas tecnologías. En cambio, prefiere vivir por su cuenta, añade Hindustan Times.

Antes la gente vivía feliz con pocas cosas. Hoy en día las personas no son felices, no son saludables y se han vuelto muy deshonestas. Eso me duele mucho”.

Por eso, fiel a su estilo de vida y concepción del mundo, Sivananda tiene un deseo tan simple como noble:

Solo quiero que la gente sea feliz, saludable y pacífica”.

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