El cliente le hizo la conversación al mesero al notar su acento irlandés. “Yo estuve en Irlanda el pasado fin de semana en un concierto”, dijo el hombre, a lo que con cierta nostalgia Millar respondió: “Yo quisiera ir a ver a mi familia aunque fuera un fin de semana”, destaca KTLA.com.

El comensal firmó la factura y salió rápidamente del local. Cuando Millar vio la cuenta, eran 122 dólares de la cuenta, mientras que en el espacio de la propina decía: 750 dólares (más de 2,1 millones de pesos), reporta The Independent.

Como para que no hubiera lugar a equívocos, el cliente, a quien Millar no le alcanzó a agradecer su generosidad, dejó este mensaje escrito en la factura: “Espero que esto te ayude a regresar a Irlanda para las vacaciones: Jeffrey”, señala ABC News.

Millar es originario de Belfast, una ciudad que en alguna época estuvo azotada por la violencia. El joven tiene una novia y está embarazada, así que esperarán a que el bebé nazca a principios del 2017 y ya tienen planeado ir a Irlanda a que los abuelos conozcan al bebé, en julio del año entrante, reporta el mismo medio.

Luego de enterarse de la propina que había recibido su novio, la mujer embarazada publicó en redes sociales: “No todo allá afuera es odio, también ha bondad”.

Esta fue la factura:

Propina
La factura tenía una nota, como para que no hubiera equivocación. / Taryn Keith

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