Le Pen, cuyo estilo ha sido descrito por muchos franceses como muy similar al del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó en el debate del miércoles que el candidato centrista tiene cuentas bancarias en las Bahamas, informa Independent.
La declaración, que caldeó el debate que estaba, seguido por más de 15 millones de franceses, sugería que Macron estaba evadiendo impuestos. Coincidencialmente (¿o no?) justo un artículo que hacía la misma aseveración fue publicado poco antes en el medio digital ultraderechista Disobedient Media, y estaba circulando en las redes sociales.
Sin embargo, en la mañana del jueves, Le Pen respondió una entrevista al medio BFM TV, en la que le preguntaron varias veces si tenía pruebas de las fuertes acusaciones contra Macron. Ella admitió que no las tenía. Tal vez por eso matizó lo que había dicho la noche anterior y dijo que no estaba acusando a su rival, ni nada por el estilo.
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Si hubiera querido hacerlo (acusarlo) lo habría hecho ayer. Solo le hice una pregunta. Si hubiera tenido pruebas, las habría presentado”, dijo.
Macron, por supuesto, negó las insinuaciones de Le Pen, y su equipo de colaboradores afirmó que el exbanquero es víctima de una “campaña de desinformación cibernética”, por la que podrían tomar acciones legales. Además, algunas fuentes de inteligencia sugieren que Macron podría ser blanco de desestabilizaciones por parte de agentes rusos a través de la mencionada Disobedient Media.
El medio francés Le Monde indicó que hizo una especie de conteo de las declaraciones de los candidatos, y concluyó que Le Pen dijo al menos 19 cosas falsas, mientras que Macron dijo 2. Por eso, concluye el rotativo:
Parece claro que si bien Macron no siempre mostró respeto total por los hechos, Le Pen dijo muchas falsedades”.
Según The Guardian, Macron parece haber mantenido su ventaja con respecto a la candidata ultraderechista después del debate. El próximo domingo en las urnas se definirá si es verdad.
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