El nombre de Adnan Oktar resulta desconocido en Colombia, pero en Turquía, su país de origen, es muy popular por la organización de explotación que lideró. Por estos días, su excéntrica vida está en pausa, puesto que fue condenado a más de mil años de prisión.

Este embaucador se hizo famoso por un espacio en el canal ‘A9’ en la televisión turca, en el que, como un auténtico gurú antisemita, compartía sermones del correcto camino musulmán. Negaba el holocausto judío y se consideraba un oponente de los masones. Además, defendía el creacionismo como a su propia vida.

Pero lo más llamativo no eran sus discursos, era que mientras él hablaba a su alrededor había mujeres vestidas en traje de baño o, en general, con poca ropa. En sus transmisiones siempre aparecía su tropa de seguidoras, que eran descritas por él como su “harén de “gatitas”, reseña El Tiempo.

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Exintegrantes del grupo que encabezaba aseguraron tras su captura que las mujeres pasaban por un lavado de cerebro, amenazas, chantajes y se les esclavizaba sexualmente.

De acuerdo con la BBC, las mujeres, una vez reclutadas, perdían el contacto con sus familias y eran persuadidas para participar en sesiones de sexo y encuentros filmados o fotografiados.

Hay que precisar que, al entrar al culto las mujeres debían casarse con Oktar, pero esto no significaba que estas mujeres tendrían relaciones sexuales exclusivamente con él, sino que podían ser convertidas en “mujeres motor”. Es decir, mujeres para complacer a múltiples hombres.

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El telepredicador y otros 13 miembros de su organización fueron arrestados en 2021 por intento de espionaje, abuso sexual y abuso de menores, en investigaciones que salpican hasta dirigentes políticos turcos. Fue sentenciado a 1075 años en prisión. 

Cuando ha sido confrontado con estos señalamientos, ha dicho que los “ataques” en su contra son parte de una conspiración mundial -dirigida por los servicios de inteligencia británicos- para dañarlo a él y a su organización.