El comediante huilense se ganó un lugar dentro del Canal Caracol desde que pasó por ‘Sábados felices’, programa de chistes al que llegó como un concursante más.

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A partir de ese momento, el humorista logró hacer parte de programas como ‘La vuelta al mundo en 80 días’ y ‘Día a día’, del que ya hace parte del elenco.

Pero antes de ganar el reconocimiento que posee actualmente, el oriundo del municipio de Suaza desempeñó otras funciones muy diferentes a las del entretenimiento.

En qué trabajó Jhovanoty, de ‘Día a día’

Hace un tiempo, el propio comediante recordó que cuando llegó por primera vez a Bogotá comenzó a vender tintos en un bingo con su padre. Pero otros empleos que tuvo los contó en el programa ‘Del amor y otros demonios’.

“[Fui] payaso, trabajé en un taller de mecánica lavando tornillos y vendí splash de Victoria’s Secret”, dijo Jhovanoty.

Lo que llamó la atención de su relato fue que precisamente ese último trabajo fue gracias a otro comediante: Peter Albeiro. En el mismo espacio, el humorista narró que su colega le planteó el negocio porque estaba trabajando con una comercializadora internacional y él vio allí algo interesante.

“Yo le pedía los ‘splash’ a Peter Albeiro y me llegaban 20, 30 tarros mensuales”, recordó Jhovanoty, con cierto tono de broma por la cantidad de los productos.

Y es que en ese momento de su vida él trabajaba a su vez en una emisora al parecer de Neiva, donde pautaba para poder darse a conocer más rápidamente. Incluso, fingió ser  representante de una supuesta compañía.

Yo compraba publicidad en la emisora donde trabajaba, terminaba de contar un chiste y el director me decía: ‘Bueno, vamos con una mención comercial con el representante de TMI Latinoamérica’, y entraba yo”.

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De acuerdo con su relato, una vez le daban paso él se hacía pasar por Edwin Ramírez, supuesto representante de la compañía ficticia: “No es lo que uno vende, sino cómo lo vende uno”.

“Daba un número de teléfono y ahí contestaba mi esposa que era la que recibía los pedidos. Me mandaba los pedidos al pin de Blackberry que teníamos y yo terminaba en la emisora y me iba a entregar los pedidos. Yo entregaba los pedidos. Esos tarritos se iban [rápido]. Me enseñó mucho”, concluyó el comediante.