El episodio no es reciente (se dio en 1995), pero ha tomado relevancia mediática en los últimos días por cuenta de un documental de Netflix que cuenta la insólita historia de un hombre al que Pepsi le prometió un avión de premio.

Ha sido tanto el furor por el documental, que la BBC escribió una extensa crónica sobre la campaña publicitaria que se salió de control y que terminó con una gigantesca demanda contra la compañía.

Leonard, el demandante, era un adolescente que en 1995 había visto una campaña publicitaria que le cambió la vida. Para ese momento, Pepsi había sacado comerciales anunciando la entrega de premios a cambios de puntos que se canjeaban por latas y botellas de la gaseosa, en Estados Unidos.

Un paquete de 6 latas de Pepsi apenas daba 4 puntos, por lo que los premios más grandes parecían ser unas gorras y camisas que se canjeaban por 1.500 puntos.

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Sin embargo, los creativos de la marca incluyeron un comercial en el que decían que se daría un avión Harrier Fighter de 23 millones de dólares a cambio de 7 millones de puntos.

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Leonard, junto con un amigo alpinista que tenía mucho dinero, hizo cuentas y concluyó que tendría que comprar el equivalente a 4 millones de dólares en latas de Pepsi para ganarse el avión de 23 millones. Era todo un gangazo.

Aunque tenían el dinero y las ganas, hablaron con la empresa primero. Pepsi pensó que era una broma, pero cuando vio que las cuentas sí cuadraban intentó hacer un arreglo económico con los jóvenes. Ellos se negaron y demandaron a la compañía.

Pepsi fue a juicio millonario y dijo que todo fue un error del comercial

Ya en el juicio, Pepsi argumentó que la publicidad debía ofrecer el avión por 700 millones de puntos y no por 7. Asimismo, la letra chica del comercial debía aclarar que era una broma lo del avión.

La empresa añadió que el comercial había sido ajustado y que por eso no incurrió en publicidad engañosa.

Finalmente, el millonario litigio fue ganado por Pepsi. “Ninguna persona objetiva podría haber concluido razonablemente que el comercial en realidad ofrecía a los consumidores un avión Harrier”, rezaba el fallo en favor de la empresa.

Aunque Leonard perdió el caso, actualmente goza de una gran fama por cuenta del mencionado documental de Netflix que se llama ‘Pepsi, Where’s My Jet?’.