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En Colombia, la regulación de la venta de medicamentos está a cargo del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, y otras entidades de salud.
Aunque los medicamentos de venta libre pueden adquirirse sin receta médica, su uso inadecuado conlleva riesgos significativos. El abuso de medicamentos de venta libre es una preocupación creciente en Colombia.
Las formas de abuso incluyen la toma en dosis distintas a las indicadas, su consumo con fines recreativos y la mezcla para crear productos no autorizados.
Este comportamiento, además de ser peligroso, pone de manifiesto la necesidad de una mayor concienciación sobre los riesgos asociados con estos medicamentos.
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“Aumento del consumo de ansiolíticos y antidepresivos”
La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre un incremento del 25 % en la prevalencia de ansiedad y depresión a nivel mundial durante la pandemia.
En Colombia, no se disponen de datos actuales sobre el consumo de ansiolíticos, pero estudios previos revelan un aumento preocupante. El presidente de la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas insta a evitar la automedicación y a limitar el uso de estos fármacos sin receta médica.
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Es importante destacar que la automedicación puede ser peligrosa. El uso de ansiolíticos debe ser siempre bajo la supervisión y prescripción de un profesional de la salud, ya que el mal uso de estos medicamentos puede llevar a efectos secundarios no deseados y dependencia.
1. Benzodiazepinas:
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- Alprazolam (Xanax)
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- Diazepam (Valium)
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- Lorazepam (Ativan)
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- Clonazepam (Klonopin)
2. Análogos de las benzodiazepinas:
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- Zolpidem (Ambien) – aunque se usa principalmente para tratar el insomnio, tiene efectos ansiolíticos en algunos casos.
3. Antidepresivos:
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- Escitalopram (Lexapro)
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- Sertralina (Zoloft)
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- Paroxetina (Paxil)
4. Buspirona:
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- Buspirona (Buspar)
Los analgésicos antiinflamatorios no esteroideos, Aines, de venta libre y comúnmente utilizados, presentan riesgos considerables.
Estudios han vinculado su uso indiscriminado con complicaciones en pacientes con diabetes, hipertensión, insuficiencia renal, hepática y otras condiciones. Además, se señala que estos fármacos podrían representar hasta el 11% de las hospitalizaciones relacionadas con medicamentos.
Como, por ejemplo, la Universidad Nacional denunció que un medicamento que puede causar la muerte sigue disponible en diferentes droguerías del país.
Se trata del Diane 35, utilizado para cierto tipo de acné y el síndrome de ovario poliquístico, pero que fue retirado del mercado francés por precaución, después de encontrar que la muerte de cuatro mujeres por tromboembolismo habría estado relacionada con el consumo de las píldoras.
De acuerdo con el informe de la Universidad Nacional, el medicamento que, según estudios, puede estar relacionado con el desarrollo de la trombosis se usa en Colombia como anticonceptivo, pese a que esta indicación no ha sido aprobada por el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, lo que aumenta su consumo y su venta indiscriminada.
La falta de control en la comercialización de fármacos peligrosos plantea serias amenazas para la salud pública, exigiendo una acción inmediata por parte de las autoridades reguladoras y una mayor responsabilidad por parte de los consumidores y distribuidores.
Estos medicamentos los creen dulces en Colombia son sumamente peligrosos @petrogustavo @MinSaludCol @PoliciaBogota @PoliciaAntiNar @FiscaliaCol pic.twitter.com/uBPHtcyGnD
— Rumiarte (@sanjedrasus) June 21, 2023
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