En los últimos años, Julio Comesaña ha tenido que asumir la responsabilidad de arreglar los procesos fallidos de técnicos anteriores. Sus entradas y salidas del Junior de Barranquilla han sido una constante desde 1991 que fue la primera vez que figuró como técnico de la institución.

Fue campeón por primera vez en 1993 durante su segundo ciclo en Los Tiburones. Luego, tuvo otros cuatro periodos intercalados entre 1997 y 2014 en los que no ganó ningún título.

(Vea también: Junior anunció a Julio Comesaña como nuevo entrenador; se agotó la paciencia con Juan Cruz)

En 2017 regresó para solucionar una crisis deportiva que tenía el elenco desde 2016-ll sin clasificar a los ocho. Para 2017-ll llegaron refuerzos de lujo como Yimmy Chará y Teófilo Gutiérrez, que de la mano de Comesaña llevaron al equipo a ser semifinalistas de Copa Sudameriacana y ganar la Copa Águila 2017.

En 2018 jugó Copa Libertadores y llegó a fase de grupos, quedó en la tercera posición y clasificó a Copa Sudamericana y fue finalista ante Atlético Paranaense, pero perdió en la tanda de penales. En ese mismo año ganó la Liga Águila 2018-ll.

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En 2019 comenzó su noveno ciclo tras el despido de Luis Fernando Suárez al no llenar las expectativas de las directivas. En ese mismo torneo consiguió el bicampeonato de liga frente a Deportivo Pasto. Este proceso duró hasta 2020, obtuvo la Superliga, dejó la dirección técnica y Amaranto Perea tomó el puesto.

Ahora, vuelve por décima vez para volver a darle alguna alegría al cuadro barranquillero que siempre ha depositado su confianza en él.