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Escrito por: Óskar Ortiz
Actualizado: 2024-12-17 15:43:00
Este es uno de los puntos más visibles sobre una persona, por lo que no pasa desapercibido cuando determinan que no quieren que nadie más los toque.
En medio de las preocupaciones que puedan existir en la realidad financiera del diario vivir como el aumento de salario mínimo y más, el cuidado del pelo tiene un capítulo especial en la salud mental.
¿Por qué hay quienes se cortan el pelo a sí mismos?
Cortarse el cabello uno mismo, según la psicología, puede ser una acción cargada de significado y simbolismo. Aunque no existe una única interpretación, diversos estudios y análisis han identificado varios motivos que podrían subyacer a esta decisión:
- Deseo de control: en momentos de incertidumbre o cambio, cortarse el cabello puede ser una forma de tomar las riendas de una situación y sentirse más en control. Al modificar la apariencia de manera tan visible, se reafirma la autonomía.
- Renovación personal: un corte de cabello drástico puede simbolizar un nuevo comienzo, una transformación o un deseo de dejar atrás el pasado. Es una forma de marcar un antes y un después en la vida.
- Expresión de emociones: en ocasiones, cortarse el cabello puede ser una manera de canalizar emociones intensas, como tristeza, enojo o frustración. Es una forma de liberar tensiones y buscar un alivio emocional.
- Autoafirmación: al desafiar las normas sociales y hacer un corte de cabello por cuenta propia, se hace una declaración de independencia y autoafirmación. Es una forma de decir “Yo puedo hacerlo”.
- Rebeldía: en algunos casos, cortarse el cabello uno mismo puede ser una forma de rebelarse contra las expectativas sociales o familiares. Es una manera de marcar la diferencia y expresar la individualidad.
¿Qué dice la psicología sobre el cabello?
La psicología, al explorar la relación entre la mente y el cuerpo, ha dedicado una considerable atención al cabello. Si bien no existe una teoría unificada, se han identificado varios aspectos clave:
- Expresión personal: es una de las primeras características que se notan en los demás y que se usan para formar las primeras impresiones. La forma de peinarse, cortarse o teñirse es una forma de expresar la identidad, personalidad y estilo.
- Pertenencia a un grupo: los peinados y estilos capilares a menudo se asocian con ciertas culturas, subculturas o grupos sociales. El cabello puede ser una forma de mostrar a qué grupo se pertenece o con quién se identifica.
- Espejo del estado emocional: El cabello puede reflejar nuestro estado emocional. Por ejemplo, el estrés puede provocar la caída del cabello, mientras que la excitación o la felicidad pueden hacer que nuestro cabello se vea más brillante y saludable.
- Mecanismos de afrontamiento: Cambiar nuestro peinado o color de cabello puede ser una forma de afrontar cambios importantes en nuestra vida o de expresar emociones difíciles.
- Trastornos psicológicos: algunos trastornos psicológicos, como la tricotilomanía (impulso incontrolable de arrancarse el cabello), pueden tener un impacto significativo en la imagen corporal y la autoestima.
- Imagen corporal: la apariencia del cabello puede influir significativamente en cómo se siente acerca de sí mismo. Un cabello sano y cuidado puede aumentar la autoestima y confianza.
- Inseguridades: por otro lado, problemas capilares como la caída del cabello, la caspa o el cabello encrespado pueden generar inseguridades y afectar la autoestima.
- Rituales y tradiciones: en muchas culturas, el cabello tiene un significado simbólico y está asociado con diversos rituales y tradiciones. Por ejemplo, cortar el cabello puede simbolizar un nuevo comienzo o dejar atrás el pasado.
- Poder y estatus: históricamente, el cabello se ha utilizado como símbolo de poder y estatus social.
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¿Qué tiene que ver el cabello con las emociones?
Aunque no existe una conexión científica directa y comprobada entre el cabello y las emociones, sí es posible encontrar varias razones por las cuales se establece esta relación:
- Expresión de identidad: el cabello ha sido históricamente un símbolo de identidad, estatus social y pertenencia a un grupo. Cambiarlo o cuidarlo de cierta manera puede ser una forma de expresar quiénes somos o cómo nos sentimos.
- Rituales y tradiciones: en muchas culturas, el cabello tiene un significado especial y se asocia con ritos de paso, cambios de vida o estados emocionales. Por ejemplo, cortarse el cabello puede simbolizar un nuevo comienzo o dejar atrás el pasado.
- Belleza y autoestima: un cabello sano y cuidado puede aumentar nuestra autoestima y hacernos sentir más seguros y atractivos. Por el contrario, problemas capilares pueden generar inseguridades y afectar nuestro estado de ánimo.
- Estrés y ansiedad: el estrés crónico puede afectar el ciclo de crecimiento del cabello y provocar problemas como la caída del cabello. Además, cuando estamos ansiosos o preocupados, podemos recurrir a hábitos como arrancarnos el cabello (tricotilomanía).
- Cambios hormonales: las hormonas influyen en el crecimiento del cabello y pueden provocar cambios en su textura y apariencia durante etapas como la pubertad, el embarazo o la menopausia. Estos cambios hormonales a menudo van acompañados de fluctuaciones emocionales.
- Condicionamiento clásico: se asocian ciertos peinados o estilos de cabello con determinadas emociones o recuerdos. Por ejemplo, un corte de cabello radical puede estar asociado con un cambio importante en nuestra vida y causar sentimientos de liberación o renovación
*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de redacción, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza ‘machine learning’ para producir texto.